basauri - La cita con el humor y la risa tiene hora, las 20.30 horas de hoy, el lugar Basauri. Cuatro actores muy reconocibles por los espectadores interpretan una comedia de situación. Marta Torné, la única mujer del reparto, habla de sus proyectos más inmediatos. Conocida por sus trabajos en televisión, participó en la serie El internado y últimamente era una de las cinco presentadoras de Hable con ellas. En su mochila particular hay más proyectos: una serie con Hugh Laurie, The Night Manager, y un programa para Telecinco Cámbiame.

¿Cómo es la obra?

-Mi personaje es una profesora de francés de los hijos de un ministro del gobierno actual. La relación entre ella y el ministro es algo más personal que profesional. Él viene a mi casa con excusas y mentiras y sin escoltas, y lo que quiere es llevarme al huerto.

Promete diversión.

-Sí, claro porque le llama el presidente para una rueda de prensa y él no puede asistir porque está en mi casa. Se habla de corrupción, de poder y vamos a reírnos, echar sentido del humor a lo que todos los días aparece como un nuevo sumario. No es la solución, pero es sano reírse de estas situaciones.

Es una actriz muy televisiva, también presentadora. ¿Qué medio le resulta más difícil?

-Pienso que es más complicado hacer televisión que teatro. ¿Sabes qué problema tiene el teatro? Que tienes más presión. Es gente que está pagando un dinero por ir a verte. La tele tiene un alcance más grande y como desventaja que no está el refugio de estar detrás de un personaje, eres tú misma, pero se puede cambiar de cadena.

Sus compañeros de reparto son también muy televisivos.

-Sobre todo Carlos, es un hombre muy mediático. En el teatro, una de las claves importantes es que hagamos muy buena taquilla y viene bien que la gente te conozca.

¿Siente vértigo cuando mira hacia el patio de butacas?

-Una se acostumbra a todo, te pasa un poco como a los médicos. Es cierto que no son momentos normales, te entra un pellizco en el estómago, sientes un respeto y una gran responsabilidad.

¿Qué proyectos tiene entre manos?

-Está previsto que vuelva Hable con ella, tengo un programa que está a falta de que lo apruebe la cadena y luego una serie con la BBC, The Night Manager, la protagoniza Hugh Laurie, el actor de House. Está previsto rodar en junio y julio. También estoy con otra serie en La 1, Seis hermanas, en un mes entrará mi personaje en pantalla.

‘Hable con ellas’ es como el Guadiana aparece y desaparece. ¿Qué pasa con ese programa?

-Eso es lo que decimos todos. No lo sé; en teoría, la última noticia que teníamos era que empezábamos el 8 de abril...

¿De que año?

-Ja, ja, ja... Está claro y a la vista que no va a ser así. No estoy preocupada, hay que olvidarse de cuándo va a volver, relajarse y esperar a que llamen.

¿Eso es serio?

-El programa no ha desaparecido, hoy en día la tele está más loca que nunca y no podemos hacer planes, la verdad. Solo te digo una cosa, estoy contenta porque tengo proyectos, no me van mal las cosas y, sobre todo, esta obra de teatro está funcionando y vamos a seguir con ella este año y el que viene. Lo importante es hacer cosas.

Le recordamos por una serie, ‘El internado’. ¿Qué supuso esa serie para usted?

-Una reencarnación por decirlo de alguna manera, fue una sorpresa por mi parte descubrir que podía interpretar y que confiaran en mí para un proyecto como era ese. Yo todas las secuencias las tenía con Amparo Baró, era alucinante. Conocía a gente que hoy forma parte de mi vida de una forma muy especial.

Para ser su primera serie y su primer trabajo de interpretación no estuvo mal.

-Fue una suerte que mi bautismo en el mundo de la interpretación fuese una serie de esas características. Había actores maravillosos, gente con experiencia y gente que no la teníamos. Fue mi primer paso en este camino.

¿Dónde se siente más cómoda, en su faceta de actriz o en la de presentadora?

-Todo depende, todos son circunstancias. Depende que tipo de director tengas, qué proyecto sea. Hay obras de teatro que me encantaría interpretar y otras que no; hay series que me gustaría y otras, ni loca. Lo mismo como presentadora.

Hay profesionales que prefieren un medio u otro.

-Sí, hay actores que dicen: Yo tele no hago. Pues yo digo que hay series que son muy buenas, que tienen una factura muy buena y hay películas que son un espanto.

¿Cómo desembarca en este mundo tan mediático?

-Lo de la tele me vino porque yo había trabajado en producción de publicidad. Me hicieron una prueba de cámara y todo fue todo un cúmulo de coincidencias. Fue todo tan sorprendente que en ocasiones pensaba: ¡Madre mía! Pero qué hago yo aquí. No lo tenía previsto.

¿No fue vocacional?

-Para nada. Yo vengo de una familia donde mi madre trabaja en una librería y mi padre era proyectista, soy ajena a todo este mundo. Es un poco raro. Prefiero pensar que lo que sucede es lo que conviene y que al final, uno no puede hacer nada por ver cuál va a ser su destino.