vitoria. Ane Ibarzabal está muy contenta con el trabajo que le toca hacer estas semanas, pero también con su tarea como redactora de la sección de Sociedad el resto del año.
Cuando los demás se van de vacaciones, usted trabaja el doble. ¿Es por seguir las recomendaciones de la CEOE y del Banco de España?
(ja,ja,ja) Estoy acostumbrada, siempre me toca trabajar en agosto porque es el momento en que puedo presentar y yo encantada de la vida.
Hasta el 2 de septiembre, ¿cuántas horas diarias pasará en la Redacción?
Unas doce. Empecé la última semana de julio solo con el informativo del mediodía y desde el 1 de agosto Roger Persiva y yo hacemos también el de la noche, así que estaré de nueve a nueve, más o menos.
¿El rato más duro es el paréntesis entre las dos ediciones?
Sí. Cuando acaba el informativo del mediodía te baja la adrenalina y llegas al de la noche con las pilas un poco gastadas. Pero hay que recuperar fuerzas y darlo todo otra vez. El año pasado terminé supercontenta pero agotada.
Este mes vive para trabajar...
Ha sido un año un poco complicado, así que es un privilegio estar trabajando en agosto.
¿Cómo ha ido la fusión de los informativos de Telecinco y Cuatro?
Ha sido un año duro porque empezó con el cierre de CNN+. Ha sido un tiempo de incertidumbre y mucha gente se ha quedado en el camino. Hemos empezado en un sitio diferente, con gente nueva, pero ha pasado como se ve en el anuncio de Mediaset España: nos acogieron fenomenal y ahora somos como una gran familia.
¿Cómo vivió el cierre de CNN+?
Fue muy difícil porque yo estuve allí muchos años, para mí fue una escuela y la mayor parte de lo que sé lo aprendí en esa cadena. Mucha gente tuvo que irse, están en el paro... han sido muchos obstáculos.
¿Veremos otro canal de 24 horas de noticias de iniciativa privada o el de TVE no tendrá competencia?
No lo sé... ¡Ojalá CNN+ no hubiera desaparecido, ojalá renaciera!, aunque lo veo complicado. Parece que de momento Canal 24H no tendrá competencia directa.
¿Es muy distinto trabajar con el chip de un canal 24 horas o hacerlo en una cadena generalista?
No tiene nada que ver un informativo de media hora que preparas toda la mañana o toda la tarde con un 24 horas.
Cuando llega al plató, ¿piensa que le toca vender bien el trabajo de todos sus compañeros?
Claro, la mayor parte del año yo estoy en el otro lado, así que intento entender a los profesionales que hacen los vídeos y vender su trabajo lo mejor posible. Ese es mi trabajo, presentar el de los demás, y no se me olvida nunca porque yo tengo los dos puntos de vista.
Eso le da una perspectiva que no tienen otros presentadores, ¿no?
Bueno, intento comprenderles más cuando no llega un vídeo o ha habido un problema con alguna imagen. Si has vivido previamente eso, entiendes mejor su situación.
Es difícil recordar un agosto con tantas noticias. ¿Hay días que son incluso demasiadas?
Nunca son demasiadas y menos por estas fechas. Llenar más de treinta minutos de informativo en verano suele ser complicado pero este año, de momento, estamos colapsados de noticias. La actualidad llega cargada de imágenes, de informaciones de última hora, ¡y cruzamos los dedos para que siga así todo agosto! Primero fue el adelanto electoral, después las turbulencias en los mercados de todo el mundo, que siguen pese a las medidas del BCE y al acuerdo alcanzado por EE.UU. para aumentar su techo de gasto. A esto se suman las concentraciones de los indignados y la ola de violencia que ha estallado en Londres. Y por si fuera poco, la próxima semana llega el Papa, con todo lo que conlleva su visita. Este año la información no se ha cogido vacaciones...
Entonces, ¿lo más difícil es elegir la apertura y hacer descartes?
De momento no nos hemos visto en esa tesitura. Abrimos siempre con una imagen potente y con un buen titular. La apertura es lo más importante, es el instante en el que el espectador decide quedarse con nosotros o no y en lo que va de verano no hemos tenido demasiados problemas para elegirla. Tampoco hemos tenido que hacer demasiados descartes. Hay que llenar media hora y todo lo que llega es bienvenido. Además, siempre hay problemas de última hora que hacen que se caigan cosas que no llegan, que entren otras... Nunca sabes bien qué informativo vas a hacer porque todo cambia constantemente.
¿Este año no harán falta reportajes de relleno?
No sobran. Hay que llenar más de media hora de informativo, uno al mediodía y otro a la noche, e intentar no repetir los temas.
Los espectadores están acostumbrados a verle presentar en pareja. ¿Es una fórmula mejor o depende de la compañía?
Están acostumbrados a verme sola en CNN+ y acompañada en Cuatro. Me gustan las dos fórmulas. Ademas, hasta ahora he tenido mucha suerte con mis compañeros. Primero fue Javier Ruiz, después Dani Serrano y ahora Roger Persiva, y ha sido un auténtico placer trabajar con los tres.
Cuatro empieza sus informativos a las 2 y a las 8. ¿Es muy distinto a arrancar a las 3 y a las 9?
Es una desventaja claramente porque una hora es vital para nosotros. Hay que tener en cuenta que muchas cosas ocurren a partir de las 12, sobre todo actos determinados, ruedas de prensa... Movilizar a los equipos, que lleguen las imágenes, todo requiere un tiempo y más cuando hablamos de fuera de Madrid. Los envíos pueden retrasarse y es un problema cuando el informativo es a las 2. Siempre hacemos un guión, una escaleta, a primera hora de la mañana, que casi nunca se cumple una vez que estamos en directo. Gracias a que el equipo de redacción de Cuatro es de lo mejorcito, siempre consiguen hacer milagros.