Pamplona. Julián López (Cuenca, 1978) forma parte del grupo de amigos que creó La hora chanante y, posteriormente, Muchachada Nui. Ahora los espectadores le pueden ver en Museo Coconut en Neox y, a lo largo del año, dará el salto al canal mayor gracias a la serie que comenzará a rodar este próximo febrero con Javier Cámara.

2010 no ha podido ser mejor para usted.

Ha sido como una plantación de semillas que verá la luz en 2011. En 2010, he trabajado mucho. Además de No controles, he rodado No lo llames amor, llámalo X y llega la segunda temporada de Museo Coconut. De esas tres cosas, solo una ha visto la luz en 2010, que ha sido Museo Coconut. Ha sido poner la semilla para que 2011 sea bueno. No me puedo quejar.

"Museo Coconut" ha firmado por una segunda temporada.

La grabación comenzará entre marzo y abril. Ha tenido una gran aceptación por parte de la cadena. Por parte de nuestros seguidores, algunos son bastante talibanes y desde el principio sabíamos que nos iban a llover las críticas, porque lo nuevo siempre hay que criticarlo, pero se han apaciguado las aguas y la serie ha calado a quien tenía que calar.

¿Ha sido un cambio radical respecto a "Muchachada Nui"?

Creo que la línea sigue pero sí que ha sido un cambio. Pasamos de un programa articulado por sketches y una figura troncal que es la de Joaquín -Reyes- en la que casi todo el peso recaía sobre él. Ahora es más coral, cada uno tiene su personaje. Es un lenguaje distinto porque son episodios que empiezan y acaban, con público en directo. Tiene una serie de elementos que a nosotros nos apetecía abordar.

¿De dónde surgió la idea de crear esta serie?

Se le ocurrió a Ernesto -Sevilla- cuando ya hablábamos de hacer una sitcom. Creo que fue él quien dijo que había tenido una idea, que era de unos vigilantes de seguridad en un museo de arte moderno. Tenía bastante claro de que los vigilantes éramos Joaquín y yo.

¿Qué personajes aparecen?

Joaquín que hace de Onofre es una persona mayor que ya está de vuelta de todo. En cambio, Emilio todavía no sabe cuál es su sitio en la vida y va a luchar por ello aunque no tenga éxito. Luego ya vinieron los personajes de Raúl Cimas como el director y de Carlos Areces como uno de los guías para conformar todo el elenco. Y el propio Ernesto haciendo del hijo de la mecenas del museo.

¿Qué características tiene su personaje de "Museo Coconut"?

Emilio Restrepo es un vigilante de seguridad que cree que su misión en el mundo es el arte porque le apasiona el arte pero tiene un talento nulo. La única posibilidad que tiene es trabajar de vigilante en un museo de arte moderno, es lo más cerca que va a estar de los artistas y de las obras de arte. Es un poco maquiavélico en algunas situaciones por querer demostrar algo que en el fondo no es.

¿Se podría calificar el humor de "Museo Coconut" como de absurdo?

Creo que sí. De hecho, creo que bebemos de tres fuentes principales: el humor absurdo, el surrealista, que van cogidos de la mano, y luego el costumbrista, que es nuestro caso por las raíces manchegas de la mayoría de los que integramos este grupo. Es la perfecta mezcla de ambas cosas. Yo soy muy amante del humor absurdo y muchas veces lo he llevado hasta las últimas consecuencias, generando silencios en las actuaciones mías como cómico.

Este año le espera el salto a Antena 3 con una serie que protagoniza Javier Cámara.

Todavía no sé el título y comenzamos a grabar en febrero. La situación parte del primer divorcio oficial que hubo en España en el año 1981.

¿En qué se basa la trama?

Javier Cámara es el divorciado, la parte implicada, yo soy el hermano de su mujer, su cuñado. A las primeras de cambio en la serie doy un disgustazo a mi madre, que todavía no lo puedo desvelar.

¿Se declara homosexual?

Le doy un disgustazo tremendo que hace que me eche de casa. Y nos vamos los dos cuñados a vivir a la casa de al lado con lo que lleva eso. No soy gay pero... Lo siento pero no lo puedo decir. Digamos que pego un volantazo a mi vida, estoy formado para una profesión y de repente no quiero hacer eso. Y mi madre se lleva un disgusto tremendo. Me dice: "Si no quieres ser eso, fuera de casa".

Esta serie sin título supone el regreso de Javier Cámara a televisión.

Después de 7 vidas, lo único que ha hecho es Lex, que era otro cariz y no tuvo la vida que tuvo 7 vidas. Se ha dedicado de pleno al cine y al teatro y es muy raro convencerle para que trabaje en algo así. Pero es gente con la que ya he trabajado antes y ver unos guiones que están muy bien escritos y muy graciosos, creo que le han animado a hacerlo. Estoy encantado de compartir este trabajo con él.