Madrid. El futuro presidente de RTVE, Alberto Oliart, estudia pedir al Parlamento la modificación de la ley de financiación de la Corporación, aprobada en julio para suprimir la publicidad, porque "va a faltar dinero" para que la televisión pública pueda emitir en Alta Definición. Oliart realizó estas declaraciones durante su comparecencia en la Comisión Consultiva de Nombramientos del Congreso, que con el apoyo de PSOE, PP, CiU y CC, y la abstención de PNV e IU, le declaró idóneo para el puesto. El martes será votado por el pleno como consejero y presidente de RTVE.
"No oculto que me va a faltar dinero, y las vicepresidentas son las que me tienen que abrir el cauce de ese dinero (...). Es necesario más dinero para estar en la alta definición y no estoy dispuesto a que me falte. Me pueden quitar otras cosas, me pueden bajar el sueldo a la mitad, me lo pueden quitar, pero eso me lo tienen que dar y espero que esta comisión y el Parlamento me ayuden a conseguirlo", señaló. Así, planteó la posibilidad de cambiar la ley de financiación de RTVE para conseguir más dinero del Estado "para que la televisión pública no pierda su alta calidad". Según apuntó, "no es mucho dinero" el que se necesita, y cuando "aterrice" en la Corporación y lo tenga "claro" lo pedirá en la Comisión.
Oliart aclaró que mantendrá el equipo de Luis Fernández y agregó que, si depende de él, ningún trabajador de RTVE "pasará al paro". El "objetivo primordial", dijo, "será conservar la calidad actual de RTVE y en lo posible mejorarla" y entre sus desafíos está el "empeño claro" de mejorar el Canal Internacional, el nuevo Canal Cultural y estar al día en las innovaciones técnicas que se tengan que realizar por el apagón analógico. Asimismo, trabajará para que los canales de RTVE estén disponibles en todos los medios interactivos y se pueda ver la televisión y escuchar la radio por el móvil y otros nuevos medios que se van a crear.
Respecto a su edad, señaló que "hay mucha gente que se sorprende" por el hecho de que con 81 años le pongan al frente "de una Corporación del tamaño y la complejidad de RTVE". "El primer sorprendido fui yo, pero me hablaron de la palabra consenso y eso me deja sin posibilidad de decir que no", indicó. Preguntado por la diputada Ana Oramas (Coalición Canaria) si pondría a una persona de 81 años al frente de RTVE contestó: "Sí, pero a mí mismo no", bromeó. En declaraciones a la salida de la reunión explicó también que había recibido muchas críticas por su edad, aunque "los viejos me han llamado diciendo que por fin se ha reivindicado a la tercera edad".