Una zona de cultivo del municipio de Juan C. Bonilla, en el estado mexicano de Puebla, se encuentra afectada desde el sábado por un socavón que hasta el momento alcanza un diámetro de unos 100 metros y 20 metros de profundidad, según informan medios locales. De acuerdo con las autoridades medioambientales, el gigantesco agujero podría ser resultado de una falla geológica y variaciones hídricas del suelo y subsuelo. No obstante, pobladores y activistas locales atribuyen el fenómeno a la sobreexplotación de mantos acuíferos por parte de grandes conglomerados industriales.

Según algunos habitantes, en esa zona existía antes un depósito de aguas superficiales, que con el paso del tiempo se fue secando y se tapó. Esta peculiaridad podría explicar la inestabilidad del terreno y la propensión del socavón a aumentar de diámetro si no se implementan medidas.

Pese al escenario de riesgo que representa esa vulnerabilidad, por esa zona pasa el gasoducto Morelos, que conecta con una termoeléctrica. Ese proyecto abarca varios otros tramos que atraviesan terrenos acuosos, lo que en perspectiva representa un riesgo para las comunidades del sector. Por ahora no se han reportado heridos ni víctimas mortales y las viviendas aledañas han sido evacuadas.