El 45% de los vehículos que circulan por carretera no tiene la inspección técnica en regla, frente al 20% de antes de la pandemia, por lo que la cifra se ha más que duplicado, según ha informado Asociación Española de Entidades Colaboradoras de la Administración en la Inspección Técnica de Vehículos (AECA-ITV).

La entidad ha recordado que el plazo de las prórrogas concedidas durante el primer estado de alarma a aquellos vehículos cuya ITV caducó entonces, finaliza el próximo 2 de marzo de 2021. Por tanto, ha recomendado a los usuarios que realicen la ITV cuanto antes.

Según AECA-ITV, se ha hecho un importante trabajo mediante los medios de comunicación y las redes sociales para facilitar a los conductores toda la información necesaria en cuanto a plazos, prórrogas o sobre el protocolo Covid exigido, entre otros aspectos.

Además, las empresas de ITV han realizado un "gran esfuerzo laboral y económico" para incrementar la capacidad global de inspecciones en un 30%, y de forma muy significativa en aquellos vehículos con mayor riesgo potencial de daños personales, como son los autocares, vehículos comerciales y de mercancías, en los que el incremento ha sido del 65% en la capacidad de inspecciones.

"La pandemia se ha llevado muchas vidas por delante. España no puede asumir más muertes que podían haberse evitado, como ocurre con un alto número de siniestros en carretera. Porque la ITV salva vidas", ha afirmado el director gerente de AECA-ITV, Guillermo Magaz.

LA ITV EVITA 540 VICTIMAS MORTALES AL AÑO.

La ITV evita al año 540 víctimas mortales por accidente y por emisiones contaminantes, 12.000 heridos de diversa consideración y 17.700 accidentes de tráfico, según el informe elaborado por el Instituto de Seguridad de los Vehículos Automóviles "Duque de Santomauro" (ISVA) de la Universidad Carlos III de Madrid, 'Contribución de la Inspección Técnica de Vehículos a la Seguridad Vial y a la protección de la salud de los ciudadanos y del medio ambiente'.

Además, el estudio señala que podrían haberse evitado al menos 8.800 accidentes, más de 7.000 heridos y 81 muertes adicionales, si el total de los vehículos que no acuden a las inspecciones obligatorias lo hubieran hecho.

En esta línea, si todos los automóviles hubieran pasado la ITV, podrían evitarse cerca de 80 muertes prematuras adicionales por emisiones contaminantes.