En total, 37 creadores y marcas de diseño del Estado español vivieron la semana pasada una prueba de fuego: subir sus propuestas para el invierno que viene a la pasarela y exponerlas a la opinión, tanto de crítica como de público, que no es moco de pavo. Nervios, horas de trabajo y más horas de trabajo... resumidas en apenas veinte minutos, que a veces saben a poco.

Desde que Roberto Diz abriera el calendario de desfiles el pasado 29 de enero a las 12 del mediodía en la Sala Bertha Benz, hasta que lo cerraron los jóvenes creadores de El Ego el domingo 2 de febrero, pasaron por las tablas de Ifema nombres consolidados del diseño como Ana Locking, The 2nd Skin Co, Ágatha Ruiz de la Prada, Pedro del Hierro, Custo Barcelona, Angel Schelesser, Brain&Beast, Andrés Sardá, Juan Vidal? Y entre todos ellos dos representantes de nuestro diseño: la firma alavesa Devota&Lomba y el peletero navarro Jesús Lorenzo para Groenlandia.

Jesús Lorenzo, en ISEM

El creador navarro eligió por segundo año consecutivo la sede del ISEM (Fashion Business School), la Universidad de Navarra en Madrid, para recibir el beneplácito tanto de público como de crítica de manera unánime.

Sus prendas de piel siempre enamoran, y su buen hacer y manejo de la profesión y del sector le han llevado a convertirse en un imprescindible de la cita madrileña. Jesús Lorenzo sabía de sobra lo que se hacía cuando decidió tomar las riendas creativas de esta empresa familiar, y ha demostrado que la piel puede ser no solo tendencia, sino fiel compañera de las nuevas generaciones de jóvenes aficionados a las prendas de calidad y para toda la vida.

Y fueron, nada más y nada menos, que la naturaleza (tanto en colores como en materias primas) y la búsqueda de la sostenibilidad en la moda las que han impulsado la nueva colección de la firma bajo el nombre de So Natural. Sobre la pasarela se vieron prendas "en blancos impresionantes, pero con forros en gamas de verdes que encontramos en la naturaleza", aseguraba Lorenzo. Con modelos muy urbanitas en los que "queremos destacar ese lado positivo de un paisaje tan poco natural como el de las ciudades, pero con tonos verdes, ordenados y limpios".

Conscientes de que el sector de la moda tiene mucho que hacer en el ámbito de la sostenibilidad, desde la firma navarra se han tomado muy en serio este aspecto, así que la sostenibilidad está muy presente en el día a día de la marca. "En Groenlandia pensamos en pasado, presente y futuro, y estamos trabajando para reducir al mínimo los residuos y contribuir al cuidado, tanto de los recursos naturales como del medio ambiente", reconoce Lorenzo.

La suya fue una colección plagada de diseños actuales, juveniles y arriesgados (algunos de ellos) con los que Jesús Lorenzo se mantiene en la línea de trabajar para hacer de la peletería un sector joven y actual, pensado para una mujer que busca comodidad, calidad y diseño.

Modesto Lomba, en los 60

Los aires sesenteros llegaron de la mano de Modesto Lomba. La experiencia es un grado, y en el caso del creador alavés son muchos grados. Siempre es una maravilla contemplar la pureza en las líneas de este modisto? y esta vez no iba a ser menos. El diseñador vasco volvió a cautivar a los presentes con una sofisticada y romántica propuesta para la temporada otoño/invierno. Una colección protagonizada por una amplia gama de colores y estampados en donde no faltaron las clásicas piezas tan propias de la firma.

El creador de Gasteiz dirigió su mirada "a la obra El paseo, del francés de origen bielorruso Marc Chagall. De hecho, este cuadro de 1917, que se describe como autorretrato del pintor junto a su mujer, Bella, en Vitchsk, su ciudad natal, da también título a esta colección", aseguraba el alavés. La pasarela se salpicó para la ocasión de prendas de terciopelo, capas conseguidas a base de bonitos chalecos guateados y pantalones anchos. El estilo sixties se completó con el uso de chaquetas trapecio y "botas altas en color pastel, que contrastan con los tonos más otoñales de las prendas, como el azul intenso, el verde botella o el morado", decía antes del pase.

Y es que El paseo fue el origen de todas las tonalidades utilizadas en la colección, como el verde o el morado, pero no faltaron tampoco microestampados y motivos florales que rompían con la sobriedad de estos tonos. Una especial mención merecen los abrigos que dominarán los armarios del próximo invierno. Destacan los trapecio, el loden, creaciones en peluche o los chalecos acolchados.

Los lazos, invitados inesperados en el desfile del alavés, llegaron al cuello y a la cintura para dar "mayor feminidad a los looks", mientras que el calzado estuvo marcado por la comodidad, con un tacón midi muy ancho para modelos acharolados tipo salón o bota.

El 'off' más el 'on'

Hace años que la firma navarra Groenlandia optó por desfilar fuera del paraguas de Ifema y montarse el show por su cuenta. Pero no son los únicos. De hecho, cada vez son más. En esta edición algunos de los desfiles más interesantes se desarrollaron fuera del recinto ferial.

Moisés Nieto regresó a la facultad, en este caso a la de Bellas Artes. Allí, entre tarros de pintura, caballetes y una marea de batas blancas, presentó su nuevo trabajo. Una modelo posaba con una sencilla tela blanca y dos estudiantes de dibujo hacían bocetos en carboncillo. Nieto vestía y desvestía a la chica con sus nuevas prendas y los alumnos seguían dibujando. La ovación fue cerrada, sobre todo agradeciendo el aire fresco que trajo consigo este no-desfile. "Tenía miedo por hacer algo tan distinto y en un sitio tan diferente. En este caso, el ejercicio que he hecho está en la colección y también en la localización". Arriesgó y acertó.

La granadina Pilar Dalbat celebraba dos décadas de profesión y lo hizo con un desfile en el salón de bóvedas de la Casa de la Panadería, en la plaza Mayor. La música en directo acompañó a un desfile sordo (invitados y modelos llevan auriculares para escuchar la misma música).

María Lafuente es una de esas diseñadoras que lleva mucho tiempo intentando concienciar a la sociedad de las tragedias medioambientales por medio sus desfiles. Y esta vez dio un paso más y utilizó las lonas que decoraron el Museo del Prado en su 200 º aniversario para hacer su colección. Casualidad.

Otrura se estrenaba en esta edición de MBFW Madrid. La firma está capitaneada por Verónica Abián y Sergio de Lázaro, que debutaron con una colección para hombre y mujer que partía de la sastrería tradicional y se adentraba en una nueva forma de entender la costura.

García Madrid volvió a apostar por una forma distinta de mostrar su trabajo, de comunicar. Las prendas descansaban en maniquíes, en una pared, en un burro... y su sinceridad brutal lo impregnaba todo: "Mi objetivo es vender, para eso tengo tres tiendas, y vivir de ello". Así de claro.

Roberto Verino es, desde hace tiempo, una de las ausencias más sonadas del calendario de Ifema. En esta ocasión citó a prensa e invitados en el Salón Real de la Casa de la Panadería. Igual que García Madrid, expuso sus prendas de forma estática e invitaba a verlas a la vez que se disfrutaba de una experiencia, por lo menos, diferente.

¿Y quién es ella?

Esta edición fue la primera dirigida por Nuria de Miguel, la nueva responsable de las pasarelas de moda organizadas por Ifema, tanto la MBFWMadrid como la Mercedes-Benz Fashion Week Ibiza. De Miguel cuenta con una larga trayectoria profesional en el ámbito de la moda, que inició en 1991 cuando comenzó a trabajar en Ifema como responsable de comunicación de las ferias de moda que se celebraban en aquel momento, y a partir de 1996 también de la denominada entonces Pasarela Cibeles, actualmente Mercedes-Benz Fashion Week Madrid. Desde aquellos años y hasta la actualidad ha continuado al frente de la Comunicación de este evento, así como de las ferias de moda, belleza y estilo de vida organizadas por Ifema, lo que le otorga un amplio conocimiento de este sector.

Fue en junio cuando la anterior directora, Charo Izquierdo, decía adiós. La que fuera máxima responsable de la pasarela desde su incorporación en 2016 anunció que abandonaba el cargo sin explicar las razones detrás de su marcha tras tres años trabajando por im-pulsar la moda nacional.