Desde que vivimos en tiempos de pandemia por el Covid-19 los negocios de nuestras ciudades y pueblos están sufriendo, ya que comprar por internet se ha convertido en una acción muy habitual. De hecho, el año pasado las ventas online aumentaron más del 30% en España.

Durante más de dos meses estuvimos confinados en casa, pero eso no impidió que siguiéramos comprando. Eso sí, la mayoría de las veces lo hacíamos online. A veces ni salíamos al supermercado por el miedo de juntarnos con otras personas. Como consecuencia, mucha gente ya se ha acostumbrado a ir de compras haciendo clic y olvidándose poco a poco de qué es entrar en una tienda, decir "buenos días" y sonreír a la persona que atiende.

Por eso, muchos comercios han optado por reinventarse, adaptarse a la nueva situación y promocionar también sus artículos en internet, ya sea a través de una tienda online, mediante publicaciones en redes sociales o a través de aplicaciones.

Respecto a esta última opción, las aplicaciones, es una de las herramientas que utilizan algunos ayuntamientos para promover el comercio local. Es el caso de Zaragoza, que a finales del año pasado lanzó Volveremos, una app para incentivar el consumo en comercios y restaurantes de la ciudad y que en solo tres semanas consiguió casi un millón de euros para canjear en los establecimientos adheridos a la campaña. El cliente solo tenía que enseñar el código QR de la app y, al pagar, automáticamente se le devolvía parte del importe para gastar en compras futuras en ese mismo local u otro.

Por su parte, el grupo Casfid ha desarrollado la app QR Municipal, un sistema de pagos basado en tecnología QR. El establecimiento puede cobrar a los clientes mediante este sistema. Para ello, los ciudadanos deben disponer de una tarjeta que es posible recargar de manera física o virtual con el importe deseado. Y para impulsar el comercio, los ayuntamientos pueden regalar estas tarjetas. Además, supone un salto más en la digitalización de los comercios, al ofrecerles una gran cantidad de información y analítica sobre sus productos, clientes y hábitos de compra, convirtiéndose también en una potente herramienta de marketing.

Plataforma de venta

¿Es necesario tener una tienda online? Hay quien opta por olvidarse de internet y centrarse en su tienda física. Otros, sin embargo, apuestan también por el ecommerce y deciden aventurarse por su cuenta o a través de plataformas que ya cuentan con experiencia. Una opción, por ejemplo, es Correos Market. A través de este marketplace, el propietario de un establecimiento puede mostrar al mundo sus productos y tener muchos más clientes. En ella se pueden comprar más de 7.500 artículos divididos en siete categorías: moda, artesanía, bebidas, alimentación, salud y belleza, tecnología. Esta plataforma de comercio electrónico cuenta con más de 800 productores de España. Y funciona como cualquier plataforma de compra: el cliente elige el producto, paga y lo recibe en su casa o en una oficina de Correos.

Mención especial merecen las librerías, pues también la empresa de servicio postal ofrece a este sector la logística y las herramientas necesarias para incorporarse al mundo digital y la venta online. Y si alguna pyme o autónomo prefiere aventurarse y crear su propia web, Correos pone a su disposición los medios para desarrollarla, incluso un equipo de profesionales para ayudarle.

Proyectos

El desarrollo de herramientas tecnológicas que ayuden a los pequeños y medianos comercios está en auge, y así lo ha demostrado la quinta edición de la Som Hackathon, un evento organizado por el parque tecnológico TecnoCampus, el Ayuntamiento de Mataró y la Cooperativa Som Mobilitat. Durante este evento, celebrado a mediados de abril de manera online, se han presentado diferentes propuestas para abordar el reto del comercio local y responsable. Una de ellas ha sido la plataforma Progress. Funciona a modo de red social donde los empresarios publican sus productos y novedades, y pueden comunicarse con los clientes, quienes al escanear cada artículo pueden saber si cumple los requisitos de comercio justo y de proximidad.

Otro de los proyectos es EcoZone, una aplicación para buscar productos a granel de vendedores y productores de proximidad y las tiendas donde se pueden adquirir. Se pueden comprar directamente a través de la app y mediante un servicio de bicimensajería se entrega al cliente.

La peluquería que Amazon ha abierto en Londres.

De lo digital a lo físico

También hay empresas que hacen al contrario de lo que es tendencia en el último año. Es el caso del gigante Amazon, que ha abierto una peluquería en Londres para adentrarse en el mundo de la belleza y el cuidado personal mediante la innovación tecnológica. En este espacio, el cliente encuentra los mismos elementos que en cualquier peluquería tradicional (sillones, espejos, secadores de pelo, peines...) pero también tablets, tecnología de realidad aumentada y códigos QR para entretenerse o saber cómo quedará su peinado o corte antes de realizarlo, por ejemplo.