Si, por ejemplo, sospechamos que hay alguien (ex parejas o parejas, conocidos, desconocidos...) que está espiando nuestras conversaciones en las diferentes redes sociales como WhatsApp, Instagram, Facebook.. podemos comprobarlo y recuperar el control de una forma relativamente sencilla.

Todas las redes sociales, en los Ajustes, en el apartado Seguridad tienen uno llamado Inicio de sesión. Ahí podemos ver desde qué dispositivos y desde qué lugares se está accediendo a nuestra cuenta. A veces suele haber un error con los lugares, porque algunas redes sociales establecen como sitio de acceso el que la compañía telefónica tiene su antena principal, y es muy habitual que aparezca Madrid o Barcelona, pero con los dispositivos desde los que se entra en nuestras cuentas no hay ningún error.

Si en la lista de accesos que nos muestra la red social vemos que se está entrando en nuestra cuenta desde otro dispositivo, a la derecha de él habrá un triangulito o tres puntos que podremos pinchar para cerrar la sesión de ese dispositivo. Antes de hacerlo podemos sacar una captura de pantalla para guardar pruebas por si tenemos que utilizarlas en algún proceso judicial.

Después de quitar el acceso a los dispositivos a los que estaban entrando sin nuestro permiso, conviene activar la Autenticación o Verificación de dos pasos. Si ponemos en marcha esta opción, a partir de ese momento cada vez que alguien intente entrar en nuestra cuenta desde otro lugar, aunque sepa nuestra contraseña, tendrá que meter un código que nos van a mandar a nuestro número de teléfono a través de un SMS. Si no lo introducen no podrán acceder, aunque sepan la contraseña. Esta opción conviene activarla en todas las redes sociales, en todos los correos electrónicos y en todas las cuentas online.

Es fundamental activar esta opción también en los correos electrónicos, ya que a través de ellos se pueden cambiar las contraseñas de todas las redes sociales en las que usemos ese correo como acceso.

Conviene tener una contraseña diferente para cada servicio online, red social y correo electrónico. De lo contrario, si alguien descubre nuestra contraseña podría acceder a todos los servicios en los que la utilicemos. También es buena idea cambiar las contraseñas de vez en cuando. En todas las redes sociales lo podemos hacer desde el apartado Seguridad en los Ajustes.

Recordad que las contraseñas son privadas y no se recomienda compartirlas con nadie. Hoy nos llevamos muy bien con alguien, pero si el día de mañana nos enfadamos pueden ocurrir estas cosas. "Si me quieres dame la contraseña de€ porque no tienes nada que ocultar, ¿no?". Pues no, las contraseñas son privadas y el control es una forma de violencia.

Cerrar las sesiones de WhatsApp

En WhatsApp, en los Ajustes, existe una opción llamada WhatsApp/Web o WhatsApp/WebEscritorio, que sirve para que podamos seguir las conversaciones de WhatsApp a través de un ordenador, y se suele usar para espiar las conversaciones de otras personas. Si ahí vemos que hay sesiones abiertas significa que en algún ordenador o navegador se están viendo las conversaciones que estamos teniendo con otras personas. Desde ese mismo apartado, en la parte de abajo podemos seleccionar una opción llamada Cerrar todas las sesiones para cortar el acceso a nuestras conversaciones.

Para evitar que alguien pueda utilizar esta opción, conviene tener el acceso al smartphone protegido con contraseña (privada), patrón, huella, identificación facial€ y tener el bloqueo automático activado. La acción de enlazar la cuenta de WhatsApp de un teléfono en un navegador dura dos segundos, así que hay que tener cuidado.

Muchas veces personas jóvenes me han dicho que creían que sus exparejas les habían hackeado el teléfono porque sabían conversaciones que estaban teniendo en redes sociales, y lo único que había pasado era que tenían acceso a su cuenta de redes o que utilizaban la opción WhatsApp Web para leer las conversaciones de Whats App. Si alguien está tentado, que sepa que espiar conversaciones privadas de otras personas es un delito.

Si sufrimos insultos, amenazas y otros problemas de forma habitual podemos guardar los mensajes como prueba y poner una denuncia en la Policía. En todas las redes sociales, correos electrónicos, teléfonos€ tenemos la opción de bloquear a otras personas para que no puedan ponerse en contacto con nosotros. Si queremos saber cómo hacerlo en una red social en concreto podemos buscar en internet o Youtube la operativa.