- La barbacoa de una familia en la isla de Navidad (Australia) fue interrumpida inesperadamente por decenas de cangrejos gigantes. Los crustáceos, que a pesar de que llegan a medir 40 centímetros de largo y pesar hasta 4 kilos son inofensivos, rodearon a los comensales, probablemente atraídos por el olor de la comida. Los animales husmearon con tranquilidad los alrededores y algunos intentaron hacerse con algún bocado de la cena. “Tienen un sentido del olfato increíble y para ser criaturas que se mueven lento, lo hacen rápido cuando hay comida alrededor”, escribió la página de turismo de la isla, que compartió algunas fotografías del momento. Los Birgus latro son animales ermitaños terrestres, conocidos como cangrejos cocoteros porque son capaces de abrir cocos con sus fuertes pinzas para alimentarse. Otros nombres coloquiales utilizados para denominar a esta especie son los de cangrejos ladrón o ladrones de palmera, por su afición a hurtar objetos brillantes de casas y tiendas de campaña. Su población en la isla Navidad, la mayor y mejor conservada del mundo, está protegida.