- Un gorila de 34 años y más de 200 kilos de peso se sometió a un escáner médico generalmente reservado para los humanos después de que se le detectara una extraña mucosidad en el interior de su hocico. Mokokou, un gorila de 210 kilos de peso fue trasladado en avión desde el zoológico de Johannesburgo (Sudáfrica) hasta el Hospital Académico Veterinario Onderstepoort en Pretoria, a escasos 60 kilómetros de distancia, donde los especialistas le realizaron una tomografía computerizada. Para ello se utilizaron las instalaciones dedicadas a los humanos y se necesitaron más de cinco médicos para subir al animal a la camilla. La exploración reveló que la bestia sufre de una rinitis crónica con pólipos inflamatorios. Según explicaron los médicos que lo atendieron, Mokokou, que cumplirá 35 años el próximo mes de julio, no está reaccionado de manera positiva al tratamiento. “El bienestar y el cuidado de Makokou, que celebrará su 35 cumpleaños el 9 de julio, sigue siendo de suma importancia para todo el personal del zoológico de Joburg”, comentó Jenny Moodley, portavoz del zoo.