Varsovia - El presidente polaco, Andrzej Duda, pidió ayer a las futuras autoridades comunitarias que trabajen para facilitar la ampliación de la Unión Europea (UE) hacía los países de los Balcanes Occidentales (Albania, Bosnia, Macedonia, Montenegro, Serbia y Kosovo), “una región necesaria para la estabilidad de Europa”.

“Los Balcanes son una parte integral de Europa, tanto geográfica como cultural e históricamente”, subrayó Duda durante la cumbre de los jefes de Gobierno de varios países europeos y balcánicos en Poznan, donde se analizan las relaciones entre la UE y los Balcanes Occidentales. Entre los asistentes ayer se encontraban la canciller alemana, Angela Merkel, y la primera ministra británica, Theresa May, además del jefe del Gobierno polaco, Mateusz Morawiecki.

“Polonia aboga por una política de ampliación de la Unión, porque queremos una Europa de solidaridad y apertura, no una Europa de prejuicios e intereses particulares”, añadió Duda, quien pidió “menos declaraciones” y “más hechos” a la hora de abordar la futura adhesión de estos países.

“Estamos obligados a establecer una fecha clara para la adhesión y no a multiplicar las declaraciones verbales, no podemos obligar a estos países (balcánicos) a participar en una carrera de fondo en la que no se ve la línea de meta”, añadió el presidente polaco.

Esta cumbre continúa el llamado proceso de Berlín, una iniciativa lanzada por Alemania en 2014 para fomentar la integración europea de esos países del sureste de Europa, así como el fortalecimiento de la cooperación regional.

La perspectiva europea de los países que integran los Balcanes Occidentales se consolidó en la Cumbre de Salónica de 2003, en la que se prometió el futuro ingreso a la UE de los países balcánicos. Desde entonces, Bosnia-Herzegovina, Kosovo, Montenegro y Serbia buscan ser los próximos Estados en acceder a la Unión Europea. - Efe