Bruselas - La Comisión Europea (CE) pidió ayer jueves a las autoridades italianas que ayuden al “rápido desembarco” del buque de la ONG alemana Sea Watch que se encuentra en las aguas territoriales de ese país con 42 personas a bordo e instó al resto de países de la Unión Europea (UE) a asumir la acogida de inmigrantes. “Espero que Italia ayude al rápido desembarco de las personas a bordo y a la vez pido a otros Estados miembros que den muestras de solidaridad”, dijo el comisario europeo de Inmigración, Dimitris Avramópulos, en una declaración leída durante la rueda de prensa diaria de la CE por la portavoz Natasha Bertaud.
El buque accedió el miércoles a aguas de Italia para desembarcar a 42 migrantes rescatados hace dos semanas en el Mediterráneo, desoyendo la prohibición del ministro italiano del Interior, Matteo Salvini.
El comisario dijo que el Ejecutivo comunitario está participando, en coordinación con los Estados miembros, en el reparto de los migrantes una vez sean desembarcados y recordó que la manera de resolver la situación en estos casos requiere un “enfoque unido” y la colaboración con terceros.
La capitana del barco, la alemana Carola Rackete, retó la férrea política de puertos cerrados para las ONG de Salvini y su reciente decreto que conlleva multas de hasta 50.000 euros para las organizaciones que incumplan su prohibición, entre otras medidas.
Por otra parte, la Comisión Europea dijo ayer que está siguiendo la creciente llegada a Chipre de migrantes procedentes de Turquía, explicó la portavoz comunitaria de Interior, Tove Ernst. La portavoz recordó que Avramópulos viajó a Chipre en marzo y que ha habido otras visitas de expertos de alto nivel desde entonces, para “evaluar las posibles necesidades”. Asimismo, dejó claro que la CE está preparada “para facilitar el apoyo necesario”.
El barco de la ONG alemana Sea Watch sigue bloqueado ante las costas de la isla de Lampedusa, tras violar la prohibición de entrar en aguas territoriales italianas, y espera a que las autoridades resuelvan su situación. La embarcación, Sea Watch 3, de bandera neerlandesa, se encuentra a tres millas (unos 5 kilómetros) de la costa, en frente del monumento conocido como Puerta de Lampedusa, Puerta de Europa, en memoria de los migrantes muertos en su viaje al continente europeo, según muestran los medios locales.
En su interior se encuentran 42 de los migrantes salvados el 12 de junio en el Mediterráneo central (en un principio eran 53 pero el resto fue desembarcado por razones médicas) y han pasado dos semanas en el mar, a la espera de un puerto seguro en el que desembarcar.
La tripulación se niega a devolver a estas personas a Libia, al no considerarlo un país seguro, y durante la noche de ayer no habían recibido la autorización para llegar a tierra italiana, confirmaron fuentes de la organización. - Efe
