Berlín - La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, se reunieron ayer lunes con los líderes de los países de los Balcanes occidentales para tratar de que Serbia y Kosovo retomen el diálogo tras semanas de tensiones. Merkel y Macron avanzaron sus intenciones en una comparecencia conjunta antes de reunirse en Berlín en una cumbre informal con los líderes de Bosnia-Herzegovina, Croacia, Kosovo, Montenegro, Serbia y Eslovenia y la alta representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Federica Mogherini. “No se trata de hacer negociaciones para el ingreso en la UE, para eso hay otros mecanismos, se trata de analizar la situación en la región tal y como la ven los distintos países. Alemania y Francia están obligadas a ayudar a estabilizar la región”, dijo Merkel. “El caso de Macedonia del Norte ha mostrado que se pueden hacer progresos”, dijo Merkel y agradeció en ese punto la actitud del primer ministro griego, Alexis Tsipras, para solucionar el prolongado conflicto bilateral. Una de las “prioridades” del encuentro, explicó el presidente francés, es ayudar a que se “retome el diálogo” entre Belgrado y Pristina, y que los contactos bilaterales se realicen de forma “menos emocional”, pero en ningún caso tratando de aportar “una solución predefinida” desde fuera.
La canciller subrayó su interés en que la “situación” entre Serbia y Kosovo se desbloquee, tras meses de desencuentros, y consideró que “no va en la dirección adecuada” la decisión de Pristina de elevar en un 100% los aranceles a las importaciones desde Serbia.
Mogherini busca desde hace un tiempo fórmulas para mejorar las relaciones entre Serbia y Kosovo y la reunión de Berlín puede ser vista como un espaldarazo de Merkel y Macron a esos esfuerzos.
Merkel, no obstante, se esforzó por rebajar las expectativas y dijo que sólo se puede esperar “un primer paso en un largo camino”.
Kosovo proclamó en 2008 su independencia de Serbia, que ha sido reconocida desde entonces por más de un centenar de países, mientras que el reino de España se niega a reconocerlo. No obstante, Serbia sigue considerando a Kosovo como una de sus provincias. Desde 2014, Serbia está en negociaciones de ingreso en la UE y la reconciliación con Kosovo es una condición importante para que las conversaciones puedan llegar a feliz término. El otro gran objetivo de la reunión, agregó Macron, es realizar una “contribución concreta” a la “estabilidad de la región”, desde la perspectiva económica hasta la de defensa y seguridad, pasando por la de justicia. A modo de ejemplo positivo de la región, tanto Merkel como Macron citaron el histórico acuerdo alcanzado entre Macedonia del Norte y Grecia para poner fin a un conflicto que se había enquistado durante muchos años.
Macron agregó que el encuentro en Berlín pretende proveer un “marco informal” para “debatir abiertamente” cuestiones complejas y favorecer la “estabilidad en la región”. - Efe