madrid - Prendas para mascotas, de alta costura, vestidos para muñecas inspirados en Lady Gaga o un traje de “flameiga” son algunos de los atuendos que fueron aportando ayer como prueba de su pericia los aspirantes a Maestros de la costura, el concurso de talentos al que solo entrarán doce de más de 10.000 candidatos.
La 1 de TVE vuelve a aliarse con Shine Iberia para buscar a los concursantes de su nuevo talent show aunque, en esa ocasión, los conocidos fogones de la cadena serán sustituidos por máquinas de coser. Los miembros del jurado del concurso, que presentará Raquel Sánchez Silva, serán Lorenzo Caprile, María Escoté y Palomo Spain (Alejandro G. Palomo).
Modistas, eso sí, “amateur”, requisito indispensable para este proceso de casting que concluyó ayer en Madrid su última prueba presencial de la primera ronda, tras realizar ayer otra en la capital, y pasar anteriormente por Barcelona, Valencia y Sevilla.
“Lo que buscamos es destreza y creatividad. La técnica tienen que tenerla pero pueden adquirirla durante el programa. La pasión es fundamental en los talent”, explica Esther González, directora de casting de Maestros de la costura y del buque insignia de TVE, MasterChef.
origen británico Este nuevo programa, un formato originario de la televisión británica, “ha superado” las expectativas de los productores desde el principio, recibiendo más de 10.000 inscripciones de perfiles “muy heterogéneos”, desde “señoras mayores” hasta hombres que quieren dar el salto a la costura tras años cosiendo redes de pesca.
También, explica González, “muchas personas jóvenes” que o bien empezaron “personalizando” su vestimenta, o bien llegan a las pruebas después de realizar estudios relacionados con el mundo de la moda, de la costura o el diseño.
Los últimos aspirantes de la primera ronda de casting pasaron ayer una prueba a la que llevaron prendas confeccionadas por ellos, que unos expertos del sector evaluaron y puntuaron para dar con los seleccionados en la siguiente fase, también desarrollada ayer y consistente en coser una prenda en 60 minutos, in situ. - DNA