Madrid. Tomavistas, lavadoras o tocadiscos fueron objetos construidos para entretener o ayudar, en el polo opuesto a la filosofía de obsolescencia programada del consumismo actual, y ahora son los protagonistas, como viajeros del tiempo, de la primera serie de producción propia de Historia. Este canal estrena hoy a las 22.50 horas El viajero del tiempo, con el episodio Vinieron para quedarse, el primero de los seis que ha grabado la productora de Miguel Ángel Tobías (Acca Media), y que, en función de la respuesta de la audiencia, tendrán continuidad.
La serie la presentará Javier Maldonado Maldo, que ha hecho un viaje por el Estado en busca de objetos únicos por rastrillos, tiendas de antigüedades, derribos y casas particulares para bucear en su historia. El viajero del tiempo, según la directora general del canal, Carolina Godayol, se basa en un formato conocido en EE.UU., denominado artefacts, es decir artefactos, a los que por distintos motivos se da importancia protagonista. Esta versión "propia y diferente" ha rescatado "objetos olvidados, irreconocibles o invisibles de tan cotidianos" para contar cómo eran y cómo son. Según Tobías el programa es "muy fácil de ver" y, además, "genera debate" porque "todo el mundo" los reconoce como parte de su memoria afectiva. "Espero que genere un movimiento de recuperación de esas cosas que todos tenemos y a las no se les da mucho valor económico pero que sí lo tiene histórico y, sobre todo emocional", precisa Tobías, que ha descubierto que hay "acumuladores" más que coleccionistas y que estos últimos son, por lo general, hombres. En EE.UU., el 5 % de sus habitantes son "acumuladores compulsivos", es decir, personas que compran y guardan cosas sólo "por si acaso".