Vitoria. Silvia Abril (Mataró, 1971) vive el humor al cien por cien. Es su filosofía de vida y "lo que le da de comer". Trabaja con el Terrat y Andreu Buenafuente es su jefe y su pareja, y las dos relaciones son compatibles, según comenta. Fue La niña de Shrek y parodió a Isabel Gemio, Cayetana Guillén-Cuervo y Ana Rosa Quintana, entre otras, en Homo zapping. Ahora presenta Las noticias de las 2 en Cuatro.
¿Qué ofrece el programa?
La posibilidad de echarse unas risas sobre todo lo que ha pasado en el día, durante la semana o el año. No trabajamos pegadas a la actualidad, lo hacemos desde el enfoque del humor.
La cita con ustedes es a las nueve y media de la noche…
Eso es, de lunes a jueves.
Una jornada dura de trabajo, buscando empleo, las cuentas no salen, no se llega a final de mes, las noticias hablan de que la crisis va a más y ustedes nos proponen risas… ¿La noticias dan para hacer humor?
Pues por todo esto que dices hay que echarle humor a la cosa, si no, ¿cómo seguimos viviendo? Todo es susceptible de humor, hasta las noticias más lúgubres, las económicas pueden ser graciosas…
A mí la prima de riesgo no me parece nada graciosa, siempre que aparece es para decirnos que nos va a ir peor.
A mí tampoco me gusta esa pariente que nos ha salido a todos en común. Pero el humor es una manera muy gratificante de continuar. O le echas humor a la vida o te quedas encerrado en casa y no sales.
La calle está muy dura y hace mucho frío.
Por eso mismo, hay que abrigarse con mucho humor. Mira, no tenemos muchos motivos para ser optimistas, es verdad, pero hay que pensar en las cosas que nos gustan y nos compensan. El trabajo, al que le guste lo que hace, los amigos, un paseo, una caña relajada... Y un programa de humor. Por favor, pido que sea Las noticias de las 2. No es un informativo…
¿Es un desinformativo?
Es una mezcla de muchas cosas y Ana y yo vamos a procurar que les guste. Así que ya saben todos, a las nueve y media de la noche sentados ante Cuatro y con el mando lejos.
Muy bien. ¿El humor es lo que más le gusta a usted?
Para mí es una manera de sobrevivir en la vida, es mi filosofía de vida. Por eso en este informativo o desinformativo, eso a gusto del espectador, damos noticias locas, no locas, aquellas en las que nadie repara...
¿Le gusta la televisión? Es un medio al que criticamos con mucha frecuencia.
Sí que me gusta, pero nos lo hemos cargado un poquito. Se están haciendo algunos programas que no tienen nombre.
¿Qué le parece la televisión de cotilleo salvaje?
Infame, fatal, la odio, no la soporto, no puedo con ella. Me supera y no la veo, aunque sé que mucha gente ve ese tipo de programas.
¿No es cotilla?
Yo lo justo, no me gusta entrar en esos juegos, pero no quiere decir que no tenga un punto, aunque no lo ejerzo.
¿No da para hacer humor los programas de cotilleo?
Muchísimo, pero me dan pena. Alguna vez que me he parado en alguno de esos programas -todos los hemos visto-, yo tengo que mirarlo todo para poder reírme y sí que se les puede buscar el punto de humor, pero la mayoría de las veces me producen lástima. Del mismo modo, me produce mucha lástima saber que hay tanta gente enganchada a ese tipo de programas.
'La niña de Shrek', una adolescente con bigote, pelo grasiento, dientes marrones… Los guionistas bordaron el personaje friki.
Fue una invención mía, no de los guionistas, era algo que tenía que sacar y que me dio mucho juego. En fin, muchos me siguen recordando por La niña de Shrek.
Pelín repulsivo.
Pues sí, pero gustó bastante y es algo que me encanta. Es un guiño, es sentido del humor, es sacar fuera cosas que llevas dentro. Saqué al fantasma que estaba en mi interior.
En 'Homo zapping' se dedicó a hacer parodias, ¿cuáles fueron sus personajes favoritos?
Cayetana Guillén Cuervo, Isabel Gemio y La niña de Shrek. En general me gustan todos los personajes que hago, son criaturas mías, pero estos tres son los que más me ponen.
¿No se le enfadan?
Con Isabel Gemio no he tenido ocasión de cruzarme. Igual ella me ha visto y me ha esquivado, no lo sé.
¿Cree que a Isabel Gemio no le gustó su personaje?
No lo sé, no he podido confirmarlo. Con Cayetana sí que he estado muchas veces y me sigue haciendo la misma pregunta: ¿Por qué me hacías tan mala?
¿Por qué?
Más que mala, la hacía mala leche. Ella es un encanto, pero en las parodias siempre sacamos lo peor de lo peor del personaje, si no, ¿qué gracia va a tener? Hermanitas de la caridad no somos. No he tenido nunca ningún problema con ningún parodiado, la gente se lo toma bien, qué va a hacer. Ana Rosa me felicitó por su parodia. Yo no hago imitaciones, hago parodias.
Si tuviera que definir el humor…
Es mi filosofía de vida, me da de comer, es en lo que trabajo, no me cuesta nada sacar mi vena de humorista, me sale sola… De qué voy a comer y en qué voy a trabajar…
Si hubiera acabado Derecho…
Quita, quita… Eso es lo que hubieran dicho en mi casa.
¿Se tomaron con humor que no acabara la carrera?
Evidentemente, no. No les hizo gracia, pero las cosas son así. Hice un favor al mundo de la abogacía.
¿Le hace gracia Andreu Buenafuente?
Me gusta y me río mucho con él.
Es su pareja y su jefe, ¿difícil?
Ambas relaciones son más que compatibles. Lo llevamos muy bien.
¿Qué proyectos tiene entre manos Andreu Buenafuente? Al menos a usted se lo habrá contado.
No me ha contado nada, quizá para que no os lo diga a vosotros. Ja, ja, ja…, en serio que no sé nada.
¿Se ríe Buenafuente con usted?
Me río yo más con él. Andreu es muy exigente en cuestiones de trabajo y por eso le hago yo menos gracia que la que él me hace a mí.