VITORIA. Xabier Lapitz aparca el tema que le ha llevado hasta Somoto, Nicaragua, para hablar del año y medio de experiencia en Onda Vasca. Un tiempo intenso de radio en el que la emisora se ha colocado en posiciones tan positivas que ha descolocado a la competencia. Por sus micrófonos han pasado, entre otros, políticos de todos los partidos, solo Patxi López y Urgell se le han resistido, "López tiene un problema", añade Lapitz.

¿Qué han supuesto este año y medio para una emisora que partió casi de cero en septiembre de 2009?

Ha cambiado mucho. Empezamos cuatro o cinco personas y ahora podemos ver el equipo que tenemos, las instalaciones en las que estamos ahora, la audiencia que tenemos… Hemos crecido espectacularmente, no ha pasado nada parecido en ninguna radio nunca. Los datos están ahí para quien los quiera consultar.

¿Qué significa?

Varias cosas. Que la gente estaba demandando un espacio radiofónico y lo estaba demandando porque lo que estaba escuchando había cambiado. Los oyentes se habían quedado huérfanos por los giros editoriales y de información que había dado Radio Euskadi, así de claro. Son los únicos que han bajado en una proporción casi exacta a la que nosotros hemos subido. Significa también que hemos armado un buen producto en muy poco tiempo, con gente muy implicada y con una empresa que nos ha dado medios y ha confiado en que era posible hacerlo.

Si hablamos a futuro…

Estoy convencido en que vamos a cerrar la temporada en los 100.000 oyentes que dice la directora, Estibaliz Ortiz. Todos los crecimientos serán ya más limitados, pero tenemos un producto muy consolidado y de aquí ya no nos mueve nadie. Estamos en primera.

Otras emisoras con más medios no han llegado al mismo lugar. ¿El secreto?

Creo que es la realidad sin cambios. Te estás refiriendo a Punto Radio. No ha funcionado nunca porque no se ajusta a la sociología de la sociedad vasca. Así es imposible, no tiene un grado de afinidad y cercanía con los que está demandando la ciudadanía . Tiene una cuota que es importante, pero no han conseguido despegar de ahí. En esa franja, sí que tienen ellos mucha competencia y poderosa. Ideológicamente se distingue muy poco de lo que puede ser Onda Cero o la Cope, la derecha española. Por lo tanto tienen una competencia más armada.

¿Se proyectan cambios después del trayecto recorrido?

Primero era una cuestión de armarla, ahora es una cuestión de ajustar la emisora, de ir afinando algunos productos. Creo que fue clave la incorporación de Javier Vizcaíno en la noche, por lo que suponía de refuerzo en los servicios informativos. Fue clave la incorporación de los profesionales y los medios de Herri Irratia. Ahora hemos dado otro salto, abrir los servicios informativos el fin de semana. Vamos cubriendo todas las cosas de lo que puede ser una radio estándar, lo hemos conseguido en muy poco tiempo y en muy poco tiempo terminaremos ofreciendo todos los productos que nos habíamos planteado.

¿Echa de menos algo?

Algo más de deportes, no tanto en Gipuzkoa donde tenemos a Iñaki Mujika y a su gente. Es un equipo consolidado y de mucho prestigio. Tenemos un embrión en Bizkaia y nos falta completarlo en Nafarroa y Araba… Pero bastante hemos hecho en tiempo de crisis, que una radio despegue así como así contratando gente y teniendo audiencia.

Por sus micrófono han pasado muchos políticos. Año y medio después le sigue faltando Patxi López.

Sí, y año y medio después el que tiene un problema es él. Si él decide que puede hablar en todas partes menos en esta emisora que tiene 88.000 oyentes y es la tercera en audiencia en Euskadi es que tiene un problema.

¿Qué problema tiene López?

Que su mensaje no va a llegar de forma directa a nuestra audiencia, por lo tanto somos nosotros los que le interpretamos. Tiene un problema de concepción democrática de los medios. Es un problema de López y por eso le juzgarán algunos en las urnas. En la encuestas el grado de aceptación de sus políticas está ahí. Es un gobierno de excusas. Yo encantado de que venga si él quiere.

¿Sigue pidiéndole entrevistas?

Sí, la última se la he pedido públicamente cuando me invitó a su fiesta. No fui a su fiesta porque me parece mal que me invite a jamón, pero no quiera contestar a mis preguntas; yo soy periodista, no comedor de jamón.

Además de a López ha echado en falta a alguien más.

La verdad es que no. Parece un empeño de López, por aquí vienen consejeros del Gobierno vasco. También se ha negado varias veces Blanca Urgell, la consejera de cultura. Por aquí ha pasado todo el mundo. No se ha vetado a nadie, esta ha sido una de nuestras señas de identidad. Contertulios tenemos de todo el arco político vasco.

Volvemos a los oyentes, la temporada, según usted, acaba con 100.000…

Vista la proyección que hemos tenido eso supondría tener una subida otra vez muy importante, pero ligeramente inferior a la que hemos venido manteniendo. Me he equivocado muy poco en todas las apuestas. La primera me superó mucho, pero después he acertado, de hecho en una me llevé la porra, en la otra no, pero pegue en el larguero. Es arriesgado hacer estas apuestas, si no pasas te llevas una decepción. Pero llegado al nivel que hemos llegado, si llegamos a 100.000 muy bien, si no llegamos también. Lo que si soy capaz de augurar ahora es que vamos a tener un crecimiento.