"Hay que reciclarse y saber desaparecer"

Recientemente, ha terminado la gira de "Beaumarchais" donde era la amante del protagonista. ¿Cómo definiría su personaje?

Madmoiselle Ménard es una mujer maravillosamente ingenua, alegre, divertida y que disfruta mucho de todos los placeres de la vida. Es una actriz de la época y digamos que siente absoluta fascinación por la figura de Beaumarchais. Le parece un hombre cariñosísimo, divertido y muy interesante.

Este espectáculo requiere muchos cambios de vestuario. ¿Cómo se aguanta el ritmo?

Era divertidísimo y se aguantaba perfectamente. Éramos 30 actores, había 90 trajes y 65 pelucas. Siempre digo que la verdadera función está detrás de los escenarios porque es una fiesta de todos los actores que van, se cambian...

Ahora que ya no tiene compromisos con el teatro, ¿hay nuevos proyectos en televisión?

Ahora estreno, aunque ha sido una participación pequeña, la serie de El secreto de Puente Viejo, con los productores de Ida y Vuelta, con los que hace tres años hice Círculo rojo junto a Carmen Maura y María Botto. Estoy ahí con ellos, en un personaje dramático, como la mala, mala, malísima. Un personaje muy bonito y creo que la serie va a ser estupenda.

¿Ha rodado todas sus apariciones en "El secreto de Puente Viejo"?

Sí, yo ya he rodado lo mío. Ellos siguen ahora a tope. A ver cuando se estrene qué pasa.

¿Cuál es su personaje?

Mi personaje es una mujer de clase alta, que al inicio de la serie, cuando da a luz, su niño sale deforme y lo pierde en el parto. Directamente, le roba el hijo a la chica que es la protagonista. Ahí empieza el conflicto.

¿Hay opciones de continuar en "El secreto de Puente Viejo"?

Creo que sí. Es un personaje que está abierto y lo importante ahora es que se estrene la serie. Estoy convencida de que va a ser un éxito.

Es un cambio de registro respecto a sus últimas series. ¿Prefiere el drama o la comedia?

Todos los personajes dentro de su código tienen una flexibilidad, tanto en la comedia como el drama. En la comedia se da un poco más la relajación y estás mucho más abierto a la improvisación. Pero me gusta mucho hacer tanto drama como comedia. He tenido la suerte de hacer en el teatro grandes personajes como la señorita Julia o Salomé y, aunque se sufre entre comillas, hay un placer por debajo muy grande.

"El secreto de Puente Viejo" supone el regreso a televisión después de un año y medio.

Mi participación en esta serie va a ser chiquitita. Ha sido una elección personal después de Aquí no hay quién viva, Círculo rojo y Maitena. Era necesario desaparecer un poco de la televisión. Es un medio que me ha dado muchísimas cosas buenas pero hay que saber medirlo.

¿Por qué era necesario parar?

Tres series seguidas... Hay que reciclarse y saber desaparecer y que el público te vuelva a echar de menos y volver a aparecer más tarde. Desde Aquí no hay quien viva he enlazado tres series seguidas. Creo que era un buen momento para decir stop. Para mí y para el público.

¿Para dedicarse a otras cosas?

Es necesario reciclarse. Me he establecido en el teatro, mi gran amor. Aquí es donde me reciclo y me gusta mucho.

Esta serie es una de las grandes apuestas de Antena 3.

Sí. El primer capítulo está rodado como Dios y lo van a poner en prime time. Luego es una serie que va a ir después de Bandolera.

¿Se está apostando más por la ficción nacional?

Ahora mismo hay un boom de series enorme y son grandes series como Hispania, Lobos y muchas que están por venir. Todavía no he podido ver 14 de abril. La República pero hay un boom de series de época.

¿Es positivo para el actor y el espectador o se satura?

Desde luego, para los actores es un beneficio tremendo. Hay una crisis bien grande en todos los sectores, todavía la arrastramos y yo siempre he dicho: Benditas series de televisión que dan de comer a muchos actores. Son unas plataformas que como requieren muchos personajes activa el trabajo a los actores.

Hay actores que se mostraban reacios a participar en series.

La televisión nos permite trabajar y mantenernos como actores y, al fin y al cabo, comer, vivir de esto. Vivir de esta profesión que en muchos momentos es difícil.

Comenzó en "Farmacia de guardia" y desde entonces es una de las caras que la gente identifica con la televisión. ¿Influye en el día a día?

He luchado por tener mi vida. Es importante refugiarte en tu vida personal, es lo que me da la estabilidad. Actualmente, tengo una vida maravillosa, me he casado este año y es lo mejor que tengo en mi vida: mi marido. Creo que ahí es donde uno se recicla, donde uno duerme, descansa. Y lo más importante es tu familia. Cuando tienes una buena familia te das cuenta de que es lo más grande.

Ve su primer episodio en "Farmacia de guardia". ¿Qué refleja la imagen?

Me veo muy tierna, muy chiquitita, y con una vocecilla como que me la tragaba. Lo recuerdo con mucha ternura y mucha diversión porque lo pasábamos muy bien y era un lujo. Ahora se rueda 12 y 13 horas si hace falta. Yo recuerdo que entonces Farmacia de guardia se hacía en 8 horas, igual que en Pepa y pepe donde trabajábamos 7-8 horas diarias. A lo mejor hacíamos 3-4 secuencias al día. Ahora es impensable, se hacen 30 páginas al día.

El personaje de Lucía en "Aquí no hay quien viva", ¿es el que más le ha marcado?

No. Es el que más se recuerda ahora. He tenido la suerte de hacer buenas series. Actualmente, tres de las mejores series. Una fue Farmacia de guardia, que fue un boom tremendo. Y luego Pepa y Pepe.

¿Aún le siguen llamando "la pija"?.

Es que todavía la ponen en la tele. Esto va a ser hasta que yo tenga 50.000 años. No me importa nada. Ha sido uno de mis grandes personajes en la tele. Es verdad que a veces digo: ¿No lo van a dejar de echar nunca?