El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha anunciado este viernes la activación de la 'Declaración de Alerta o Emergencia Sanitaria' en Euskadi' con motivo de la pandemia por coronavirus, una medida que abre la puerta a la adopción de medidas como el confinamiento de personas en sus domicilios, la restricción del acceso a determinadas zonas, o la limitación de servicios públicos o del consumo de bienes.

El lehendakari, en una comparecencia por vía telemática, ha reconocido que las medidas que se están adoptando implican un esfuerzo "extraordinario" para la población, aunque ha asegurado que se trata de unas actuaciones "justificadas" ante la "gravedad" la pandemia, que en Euskadi ha causado 14 muertes y afecta ya a 417 personas. "Todavía no ha pasado lo peor", ha advertido, tras lo que ha anunciado que habrá que "intensificar el esfuerzo colectivo" para combatir el Covid-19.

Urkullu ha comparecido ante los medios de comunicación por vía telemática tras la reunión extraordinaria del Consejo de Gobierno celebrada este viernes, en la que se ha analizado la situación de la pandemia por coronavirus y las medidas para combatir esta crisis sanitaria en Euskadi.

En una intervención sin presencia de periodistas, que han planteado sus preguntas al lehendakari por vía telemática, el presidente vasco se ha referido a las repercusiones que puede tener la 'Declaración de Alerta o Emergencia Sanitaria' y la activación del 'Plan de Protección Civil', que también se ha acordado este viernes.

En este sentido, ha recordado el artículo 8 de la Ley de Gestión de Emergencias del País Vasco abre la puerta a la posibilidad de aplicar medidas "que afecten a derechos de la ciudadanía en los términos establecidos por las leyes, así como adoptar medidas de obligado cumplimiento para sus destinatarios".

EVACUACIONES Y RESTRICCIONES.

Dicho artículo señala que entre esas posibles medidas, se encuentra "el confinamiento de personas en sus domicilios o en lugares seguros", la "evacuación o alejamiento de las personas de los lugares de peligro", la "restricción de acceso a zonas de peligro o a zonas de operación", y "la limitación o condicionamiento del uso de servicios públicos y privados o el consumo de bienes".

También se recoge en este artículo la posibilidad de "limitación o prohibición de actividades en lugares determinados y obligación de adoptar precauciones, prevenciones o comportamientos concretos". Todas estas medidas, según se recoge en la ley, tendrán una vigencia "limitada estrictamente al tiempo necesario para afrontar la emergencia, deberán ser proporcionadas a la entidad del riesgo y no darán derecho a indemnización alguna".

Junto a la Declaración de Emergencia Sanitaria y la activación del Plan de Protección Civil, en la reunión de este viernes Urkullu, ha firmado un decreto en el que, en virtud de la Ley Vasca de Gestión de Emergencias, asume la dirección única y de respuesta de protección civil la actual situación de emergencia. Estas tres resoluciones del Gobierno se publicarán en el Boletín Oficial del País Vasco (BOPV) el próximo lunes.

El lehendakari, que ha apelado a la "corresponsabilidad" de todos los ciudadanos para respetar las medidas de prevención y atender a las recomendaciones sanitarias, ha recordado algunas de las principales decisiones que ha adoptado el Ejecutivo en los últimos días para combatir la pandemia, como la suspensión de la actividad educativa presencial en todos los centros de enseñanza de Euskadi.

LÍNEA DE CRÉDITO DE 100 MILLONES.

Asimismo, ha reiterado que en los próximos días se constituirá un fondo extraordinario dotado con 300 millones de euros para reforzar los sistemas sanitario y educativo, así como para apoyar a familias, empresas, autónomos y al empleo. A este fondo se le añadirá una línea extraordinaria de financiación para pymes y autónomos, que tendrá una dotación de cien millones de euros.

Urkullu ha explicado que ha comunicado la decisión de declarar la alerta sanitaria al presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, a los tres diputados generales, a los presidentes de las Juntas Generales de los tres territorios vacos, al presidente de Eudel, y a los alcaldes de las capitales de Eukadi. Además, ha explicado que enviará la comunicación sobre esta medida a los líderes de los partidos políticos.

Preguntado sobre si cree que los 2.800 millones que va a transferir el Gobierno central a las comunidades autónomas serán "suficientes" para luchar contra el Covid-19, ha recordado que el Gobierno Vasco tiene previsto aprobar el próximo martes en Consejo de Gobierno un fondo de 300 millones "complementario" a las medidas del Ejecutivo central. "Nosotros vamos a encargarnos de articular ese fondo o los fondos que sean necesarios", ha indicado.

Tras recordar que el fondo vasco se destinará al ámbito sanitario, educativo, empresarial, autónomo y a las familias, el lehendakari ha explicado que también se pondrá a disposición de pymes y autónomos un fondo de circulante. "Nuestras medidas son complementarias para lo que puedan ser las medidas adoptadas al Gobierno español. No se trata de entrar a evaluar una medida, que será una de tantas de las que se tengan que adoptar", ha señalado.

ATENCIÓN SANITARIA "GARANTIZADA".

Ante la posibilidad de que se produzca un "colapso" en los centros sanitarios de Osakidetza, el lehendakari ha explicado que desde la experiencia que se ha tenido en el hospital de Txagorritxu, en Vitoria, el Gobierno está articulando todas las medidas necesarias. "Las tenemos analizadas y, en este momento, estamos en condiciones de poder decir que estamos dispuestos a poder afrontar esta situación con una capacidad operativa garantizada", ha asegurado.

Ante esta situación, ha afirmado que no teme un problema de "desertización" del País Vasco, y ha recordado que se trata de un "problema global, mundial" en el que es necesario "actuar en lo local". "Euskadi tiene herramientas para actuar desde lo local y esa es nuestra responsabilidad", ha señalado.

En este sentido, ha reconocido que "no es fácil proporcionar los mensajes entre la apelación la responsabilidad, al compromiso cívico y al compromiso con la prevención" con la "interpretación de que se esté generando alerta". "No es deseo de generar alerta, sino apelar a la responsabilidad cívica, personal y colectiva", ha insistido