donostia - El Aita Mari tiene previsto llegar a primera hora de hoy a Palma de Mallorca y así obedecer la orden de la Autoridad Marítima Española. El pesquero guipuzcoano reconvertido en buque de rescate se desplazaba este domingo a Lesbos cuando recibió el aviso de que carecía permiso para dirigirse al Mediterráneo. Algo que para la ONG Salvamento Marítimo Humanitario es “un sinsentido”, ya que “navegar es algo legal que no se puede prohibir desde un despacho”.

El barco, repleto de material médico, productos de higiene básicos y leche en polvo para bebés y con la comunicación previa de que “no iba a actuar en labores de salvamento”, recibió el aviso de la Autoridad Marítima Española este domingo de “dirigirse a puerto español y solicitar despacho indicando puerto o zona de destino y detallando la actividad que pretenden realizar”.

Algo que en palabras de Iñigo Gutiérrez, vicepresidente de la ONG, “va en contra de la autoridad lusa”, ya que el Aita Mari zarpó desde Lisboa el viernes pasado con el permiso para navegar hasta Grecia.

“Ya dijimos lo que íbamos a hacer, por lo que no tiene sentido que la autoridad española nos vuelva a citar para volver a contarlo”, explicó.

La intención del Aita Mari es solo transportar ayuda humanitaria y utilizar las islas griegas como sede en la que convertir el barco en un hospital y en ningún caso intervenir en las labores de salvamento.

Los miembros de la ONG así se lo hicieron saber a la Autoridad Marítima Española, pero ante la falta de respuesta decidieron cambiar de dirección y regresar a un puerto español cercano, el de Palma de Mallorca.

a la espera del trámite Según Gutiérrez, el trámite para poder zarpar podría darse en el mismo momento de atracar la embarcación, ya que fue solicitado el mismo domingo, pero todo depende “de la intención del Gobierno español”.

“Ya no nos sorprende nada”, aseguró, añadiendo que la espera en Palma de Mallorca podría prolongarse en un tiempo indefinido.

Para “aprovechar la estancia allí”, la ONG se ha puesto en contacto con varios organizaciones de la isla con el objetivo de reunir más ayuda humanitaria que trasladar a Lesbos.

En la actualiad, en las islas del Egeo hay 14.900 personas a la espera de la resolución de sus solicitudes de asilo con su movilidad geográfica restringida, por lo que la ayuda es “indispensable” y debe darse “con la mayor brevedad posible”, recordó en un comunicado la tripulación del Aita Mari.