SÉUL. "Ahora estamos preparándonos para una gran acción. Hasta que llegue ese momento nos mantendremos en silencio, como la calma antes de la tempestad", explicó Cheollima Civil Defense (CCD) con el estilo críptico que caracteriza los mensajes que publica en su web.
La misteriosa organización añadió en el mensaje, escrito en coreano, que muchos artículos publicados sobre CCD contienen elementos que "no son verdad" y pidió a la prensa respetar el anonimato de sus integrantes y "publicar solo hechos que hayan sido verificados".
En ese sentido, aseguró que no ha mantenido contacto con desertores norcoreanos residentes en Corea del Sur e instó a los medios a no "confiar en los refugiados que hablan sobre Free Joseon (el nuevo nombre que adoptó recientemente el grupo) ni en aquellos que se hacen pasar por miembros" de la organización. Medios surcoreanos han publicado piezas en las que desertores norcoreanos han asegurado mantener contacto con CCD y han ofrecido detalles sobre sus supuestas actividades.
El mensaje del grupo opositor llega un día después de que Corea del Norte se pronunciara por primera vez sobre el ataque contra su embajada en Madrid, acaecido el pasado 22 de febrero.
Pionyang tildó el asalto de "grave ataque terrorista" y reclamó a las autoridades españolas una investigación a fondo para hallar a sus responsables y llevarlos ante la justicia.
Durante el ataque, que la semana pasada fue reivindicado por CCD, el personal de la embajada fue maniatado y golpeado durante unas cinco horas por un grupo de 10 hombres que se introdujo en las instalaciones y robó después equipos informáticos antes de huir, según el auto judicial publicado por la Audiencia Nacional española.
El juez encargado de la investigación ha solicitado a Estados Unidos, donde se encuentran los sospechosos del ataque, la extradición de las dos personas (ambas de origen coreano y con pasaporte mexicano y estadounidense, respectivamente) a las que considera cabecillas del grupo.
El grupo CCD, que apareció en la red por primera vez en 2017 y que aún no ha aclarado cuál fue el objetivo del ataque a la embajada, ha asegurado estar detrás del rescate de norcoreanos amenazados por el régimen y ha llegado a proclamar un gobierno en el exilio.