Bilbao - Una sonrisa, el abrazo o la llamada de una persona amiga siempre se agradece. Y más si es en Navidad, unas fechas tan entrañables como sensibles. Por eso, el servicio de teleasistencia para personas mayores y dependientes BetiON ha organizado la campaña Ninguna persona usuaria sin felicitación de Navidad. La idea es que todas y cada una de las 47.329 personas que llevan su botón rojo colgado al cuello sientan ese calor en unos días en los que los recuerdos de la familia o la infancia se hacen muy presentes.
“En el día a día del servicio detectamos personas usuarias con situaciones particulares. Estás fechas, se hacen especialmente sensibles por lo que hemos tratado de trasladar el apoyo que el servicio hace de forma telefónica a la vida real”, explica Laura Nevado, trabajadora social de BetiON, cuyo equipo lanzó esta iniciativa “pionera” que ya ha logrado arrancar las lágrimas y el agradecimiento del grupo de personas que “por sus características sociosanitarias o por su situación particular reciben un nivel de apoyo intenso por parte del servicio de teleasistencia”.
Esta semana invitaron a este grupo de personas que estuvieron en la sede central de BetiON, donde se hizo una dinámica para romper el hielo del primer cara a cara, recibieron una pequeña charla de hábitos saludables por parte del personal del servicio, conocieron toda las instalaciones y al personal y luego compartieron un pequeño lunch. Para facilitar a las personas que acudieran a la visita y que solo se preocupasen de pasarlo bien, BetiON envió taxis a recoger a algunas de ellas que tenían peor combinación para llegar. Otras, las más autónomas, acudieron en transporte público e incluso a pie. “La experiencia ha sido muy emotiva para ellos y para quienes trabajamos en el servicio porque agradecen mucho que nos acordemos de ellos en estos días”, afirma Nevado.
Pero ahí no quedó la cosa porque también tuvieron en cuenta a aquellas personas que se encontraban en situación similar y no les apetecía acudir al acto o personas con problemas de salud y movilidad que les dificultaban el desplazamiento. Así, técnicos de la unidad móvil y teleoperadoras también llevaron el espíritu de la Navidad hasta esos hogares.
Según explica Nevado, se concertaron “un total de 30 visitas para que tanto el personal de coordinación de integración como el personal TUM (técnico de unidad móvil) hagan una visita a estas personas en la que se aproveche para hacerles entrega de una felicitación de navidad y un pequeño obsequio por parte del servicio”. El regalo no fue top-secret y sí muy sano, un ramo de frutas y dulces sin azúcar. Aparte, a algunas de esas visitas se sumaron personal voluntario del servicio que habitualmente no tiene contacto físico en domicilio con las personas usuarias. Para Nevado, la iniciativa Ninguna persona usuaria sin felicitación de Navidad ha sido “muy enriquecedor en lo personal y en lo profesional, pero también ha sido muy emotivo, lo cual hace que haya muchas ganas de seguir trabajando día a día para mejorar el bienestar de los usuarios del servicio” y añade que “como dice el anuncio de la lotería, lo importante es compartir estos momentos”.
Teleasistencia. El servicio BetiON, “pionero” desde su puesta en marcha en 2011, es un modelo de teleasistencia basado en la coordinación de servicios y prestaciones sociales y sanitarias que permite a las personas mayores o con alguna dependencia pedir ayuda las 24 horas del día los 7 días de la semana en caso de emergencia. El año 2017 este servicio dependiente del Gobierno Vasco atendió a 47.329 personas usuarias.