Bilbao - El País Vasco es la comunidad autónoma con la tasa de disoluciones matrimoniales más baja, 3,4 por cada 10.000 habitantes, según los datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que indican, además, que el número de demandas de disolución matrimonial (separaciones y divorcios) ha bajado un 4,3% en el tercer trimestre en Euskadi con respecto al mismo periodo de 2017.
Según los últimos datos publicados por el CGPJ, en la CAV se produjeron entre julio y septiembre de este año un total de 749 separaciones y divorcios frente a los 783 de hace un año. En concreto se produjeron en el País Vasco 464 divorcios acordados frente a los 489 de 2017, un descenso del 5,1%; mientras que los no consensuados fueron 256, frente a 260 hace un año (un 1,5% menos).
Las separaciones contenciosas en el tercer trimestre de 2018 fueron 13 (11 hace un año), un 18,2% más, mientras que las consensuadas alcanzaron las 16 (23 en 2017), un 30,4% menos. También hubo dos nulidades matrimoniales, las mismas que en 2017.
El informe calcula la tasa de demandas de disolución matrimonial de todo el año respecto a la población de cada autonomía a fecha 1 de enero de 2018. De este modo se puede ver que el mayor número de demandas de disolución por cada 10.000 habitantes se da en la Comunidad Valenciana, con 5,7; Andalucía y Canarias, con 5,1; Baleares, con 5; y Galicia, con 4,9. Todas esas regiones superan la media estatal, que es de 4,7 disoluciones por cada 10.000 habitantes.
En el conjunto del Estado el número de demandas de disolución matrimonial descendió un 2,4% en el tercer trimestre. Entre julio y septiembre se produjeron 20.815 divorcios y 947 separaciones. - Efe