valencia - La vicepresidenta del Gobierno valenciano, Mónica Oltra, afirmó ayer que el Gobierno español tenía que haber buscado una solución “mucho más rápida” a la situación de los doce inmigrantes rescatados por un pesquero de Santa Pola mientras faenaba en el Mediterráneo. Aunque se congratuló del desenlace del rescate de inmigrantes realizado por el buque Nuestra Madre Loreto, Oltra incidió en que eso podría haberse producido “mucho antes” y no haber tenido que sufrir la angustia y la escasez de combustible y alimentos a bordo del pesquero, cuya tripulación ha actuado con “decencia humana”.

Ahora, después de muchos días de angustia e incertidumbre, la tripulación del barco Nuestra Madre Loreto, con base en Santa Pola (Alicante), podrá volver a la normalidad y en breve retomará su actividad pesquera después de que el domingo pudieran ser desembarcados en Malta los migrantes que rescató el pasado 22 de noviembre a unas ochenta millas de las costas de Libia. El patrón del pesquero, Pascual Durá, y el resto de la tripulación pusieron rumbo hacia el puerto de Licata, en Sicilia, tras diez días de incertidumbre, un fuerte temporal, falta de comida y la enfermedad de varios de los migrantes rescatados, con el objetivo de reanudar la pesca hasta que vuelvan a Santa Pola el 21 o el 22 de diciembre.

El armador de la embarcación y padre del patrón, José Durá, señaló ayer que los miembros del barco se encuentran “mejor de ánimo”, después de lo vivido los últimos días en alta mar, y tienen la intención de volver a centrarse en el trabajo y “ponerse al día” en la pesca de la quisquilla.

El pesquero rescató el 22 de noviembre a doce migrantes, uno de los cuales fue evacuado de urgencia el pasado viernes en helicóptero debido a su precario estado de salud, por lo que tuvo que ser atendido en Malta. Este domingo, el barco Nuestra Madre Loreto entregó a una nave de la Guardia Costera de Malta a los otros once inmigrantes. Hasta entonces, los rescatados permanecieron diez días a bordo del pesquero, en alta mar, a la espera de que algún país de la zona permitiera su desembarco.

Según la versión de los migrantes, viajaban en una pequeña embarcación cuando fueron localizados por una patrullera libia y algunos de ellos se tiraron al agua y fueron rescatados por el pesquero.

Ante las acusaciones de que el Gobierno español prolongó innecesariamente la permanencia del barco en alta mar al instarle a dirigirse al puerto más cercano, el delegado gubernamental en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Fulgencio, aseguró que el Gobierno “en ningún momento ha desatendido” a los migrantes rescatados. Fulgencio explicó que la voluntad del Gobierno respecto a estas personas sigue siendo la misma que el primer día: resolver su situación pero de manera individualizada.

Situaciones personales Tras la entrega de los inmigrantes a Malta, y sobre la posibilidad de que finalmente sean acogidos por España, el delegado dijo que hay que ser prudentes con la situación de personas rescatadas más allá de las fronteras españolas y con afectación a otros países. “Hay que ver con tranquilidad las circunstancias y estudiar cada situación, no podemos hablar de la misma para todos porque no sabemos cuáles son sus condiciones jurídicas”, reiteró.

El pasado sábado por la noche, tras diez días esperando una solución, el pesquero de Santa Pola, al no tener un puerto en el que recalar, puso rumbo hacia las costas españolas, desoyendo las indicaciones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que les instó a cumplir las leyes internacionales y dirigirse al puerto más seguro y cercano. Finalmente, el domingo el barco recibió indicaciones para dirigirse hacia Malta.

En este sentido, Oltra recordó ayer el apoyo del Gobierno valenciano a la labor del pesquero, hasta el punto de que, si volvía a su puerto, iba a estar esperándolo. Apuntó que una vez trasladados a Malta los migrantes, ahora hay que estudiar de qué manera se da apoyo a barcos como Nuestra Señora Loreto, que ha actuado de forma humanitaria mientras faenaba.

El pesquero “ha cumplido con la decencia, la moralidad y el derecho humanitario” y no puede tener por ello perjuicios personales ni económicos por una acción que se ha de tener cuando tienes decencia humana, concluyó la vicepresidenta valenciana.

Nuestra Madre Loreto ya salvó en junio de 2006 a veintiséis migrantes, uno de ellos muerto, frente a las mismas costas libias, en noviembre de ese mismo año recogió a otras cuatro personas en la zona y el propio José Durá también rescató a 51 inmigrantes subsaharianos a cien millas de Malta en julio de 2006 a bordo del Francisco y Catalina. - Efe