DONOSTIA. Los hechos enjuiciados sucedieron, sobre las 18.15 horas del 11 de febrero de 2016, cuando, según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía, al que ha tenido acceso EFE, el niño se subió a un autobús que cubre una de las distintas líneas de transporte público de la ciudad.
Una vez en el interior del vehículo, el procesado se dio cuenta de que el menor se encontraba sentado solo y se sentó junto a él, tras lo que, "guiado de un ánimo libidinoso", comenzó a "tocarle el tobillo" y posteriormente sus partes íntimas "por encima de la ropa", al tiempo que le pregunta a ver "si le gustaba".
El pequeño, "asustado", abandonó entonces el asiento, se dirigió a la parte trasera del autobús y,acto seguido, se bajó del vehículo en la siguiente parada "aún cuando no le correspondía".
Durante el juicio por estos hechos celebrado esta mañana en la Sección Primera de la Audiencia de Gipuzkoa, la defensa ha alcanzado un acuerdo con la Fiscalía -al que no se ha opuesto la acusación particular-, por el que el procesado ha admitido lo sucedido y ha sido condenado a dos años de prisión como autor de un delito de abusos sexuales, así como a compensar a su víctima con 800 euros.
Además, el inculpado no podrá comunicarse con el niño ni aproximarse a él durante los cinco años en los que permanecerá en libertad vigilada, ya que no deberá cumplir la pena de prisión que le ha sido suspendida con la condición de que no vuelva a delinquir en los dos próximos años y de que abone la indemnización acordada.
El juicio por estos hechos estaba señalado inicialmente para el pasado 18 de junio, aunque tuvo que ser suspendido debido a la incomparecencia del procesado, circunstancia que obligó al tribunal a aplazar la vista y ordenar la de búsqueda y captura del inculpado