Madrid - El histórico capo gallego Manuel Charlín Gama, El Viejo, fue detenido ayer en una macro operación contra el tráfico de drogas centrada en una organización criminal compuesta por más de 25 personas que pretendían descargar un cargamento de 2.500 kilos de cocaína en la ría de Arousa.
Decenas de agentes de la Policía irrumpió ayer en su mansión de Vilanova de Arosa para detenerlo y realizar un registro. Además, fue arrestrado su hijo Mlechor Charlín. La embarcación, cargada frente a las costas sudamericanas, fue abordada por los GEO y remolcada a Canarias. Su descarga estaba prevista en las costas del país vecino, Portugal. Esta organización es una de las más importantes dedicadas a la importación de cocaína a través de las costas gallegas.
Además de las detenciones, 17 de ellas en Galicia, se practicaron registros, algunos de ellos en las localidades gallegas de Boiro, Ribeira, Vilagarcía de Arousa, Vilanova de Arousa y Cambados; así como en Marbella (Málaga), Huelva y Yuncos (Toledo). La operación está coordinada por los servicios centrales de la Policía Nacional con ayuda de las unidades de drogas y crimen organizado (Udyco) de Galicia y Almería, grupos de respuesta de crimen organizado (Greco), guías caninos, unidad de intervención policial y servicios aéreos, entre otros efectivos.
La operación estaba dirigida por el clan de los Charlines y reunía a históricos narcos y lancheros de las Rías Baixas, que siguen lucrándose de este negocio. Entre los detenidos se encuentra Jacinto Santos Viñas, otro de los históricos narcos que fue arrestado en Meis (Pontevedra), y Jose Andrés Bóveda Ozores, alias Charly, después de que la Policía registrase su astillero en el muelle de Tragove a nombre de la sociedad Graunner Ships SL.
un conocido histórico Manuel Charlín Gama, apodado El Viejo, saltó a la fama como el capo de la droga gallego y está considerado como una pieza clave en la historia del narcotráfico en el Estado. En 1990 le asestaron el primer gran golpe, aunque ya había pasado por la cárcel para entonces, con la Operación Nécora, desarrollada por el entonces juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón. Nueve años más tarde, fue condenado a 20 años de cárcel por organizar el transporte en barco de 600 kilos de cocaína desde Colombia hasta las costas de Galicia y en 2003 volvió a ser condenado, junto a otros trece miembros del clan, a 15 años por los delitos de blanqueo de dinero procedente del narcotráfico y fraude fiscal, aunque el Supremo rebajó esa pena a 13 años.
El Viejo volvió a la calle en 2010, gracias a la nueva doctrina de refundición de las penas. 28 años después, el patriarca de los Charlines, ya octogenario, salta de nuevo a los medios con otra macro operación contra el narcotráfico gallego, demostrando que no descansa.
El clan de los Charlines está formado, según los investigadores, por Manuel Charlín Gama, su mujer, Josefa Pomares, y sus hijos, todos a la sombra del Viejo. - DNA