2 Iñigo Imaz

Sara ? Las ikastolas de Iparralde, agrupadas en Seaska, han anunciado la ruptura de las negociaciones que desde finales del pasado año mantenían junto a Euskararen Erakunde Publikoa (Institución Pública del Euskera) con el Ministerio de Educación del Gobierno francés. La ruptura se hizo pública con ocasión de la asamblea de escritores vascos que se celebró en Sara, los pasados días de domingo y lunes de Pascua. Desde hace 13 años, las ikastolas de Iparralde han doblado su alumnado, pasando del 5% al 10% en Primaria, una tendencia alcista que, de seguir al mismo ritmo, llevará a las ikastolas a cifras cercanas al 20% de matriculaciones. La Institución Pública del Euskera lo dejó claro en su reciente informe: las ikastolas han crecido un 80% en los últimos 13 años, tanto en Primaria como en Bachiller, mientras que en el Liceo se ha crecido en torno al 46%.

Mientras tanto, las escuelas privadas y públicas han crecido un 1% y un 2%, respectivamente, y esa parece ser la clave de la actitud de las autoridades francesas, que con su política de cero puestos para profesorado de las ikastolas, pueden dar al traste con el constante crecimiento, según lamentan desde la organización. Entre 2015 y 2017, un convenio firmado entre la Institución Pública del Euskera, Seaska y el Ministerio de Educación francés puso fin a una larga historia de confrontación. Sin embargo, tras la llegada de Pierre Barriere como inspector de la Academia de Educación de Pirineos Atlánticos, Seaska critica que el convenio empezó a incumplirse.

Los representantes de las ikastolas mantuvieron sendas reuniones en diciembre de 2017 y enero de 2018 con las instituciones francesas, a las que plantearon las necesidades de profesorado derivadas del crecimiento que están experimentando las ikastolas de Lapurdi, Baja Navarra y Zuberoa, y que este año se traduce en 230 alumnos y alumnas más. Además, los alumnos del Liceo iban a pasar de los 3.686 alumnos de septiembre de 2017 a los 3.920 que se prevén para septiembre de este año.

“Alerta roja” Los portavoces de Seaska recordaron también la promesa que Barriere hizo en relación a los alumnos de Primaria, comprometiéndose a crear 4,5 puestos de profesorado para 2018. Ahora, tras esta ruptura de negociaciones, la situación de las ikastolas se hace insostenible y la comunidad de las ikastolas de Iparralde lanza una llamada de “alerta roja” y sus portavoces creen que la movilización para obligar a las instituciones educativas de Pau, Burdeos y París será inevitable. Seaska quiso mostrar su enfado con los representantes de Educación ya que en la última reunión, tanto el Rectorado como el inspector de la Academia se retractaron de sus promesas anteriores y anunciaron que la previsión de nuevos puestos para el profesorado será de cero en 2018. Es más, el inspector de la Academia propuso una reorganización que perjudicará a dos de cada tres ikastolas. Así, en Primaria las clases serían de unos 29 alumnos cada una, llegando a 50 en algunos municipios. En el Liceo los grupos serían de 39 y en los colegios podrían ser de 36, 38 y hasta 47 alumnos por aula.

Por otro lado, tras los esfuerzos que desde el Consejo de Aquitania se han desplegado para crear un Liceo en Lengua Vasca, no es comprensible que el Rectorado imponga nuevas trabas hasta el punto de que, tras permitir hacer los exámenes de acceso en euskera el año pasado, ahora vuelvan a imponerse los exámenes en francés. De cara al Herri Urrats, se abre un período de movilizaciones a nivel local. l