BRUSELAS. El Ejecutivo comunitario ha presentado sus propuestas de Totales Admisibles de Capturas (TAC) y cuotas para las aguas del Atlántico y el mar del Norte, que los ministros europeos de Pesca negociarán en el Consejo del próximo diciembre.
Sobre la base de la "recomendación científica", Bruselas ha planteado hoy mantener o aumentar las cuotas pesqueras para 53 reservas que se considera que están en una situación saludable, mientras que pidió recortes para 25 poblaciones en malas condiciones.
La pesca de la merluza, la especie de mayor valor comercial para el sector español, sufrirá una importante reducción en aguas ibéricas en caso de que salga adelante la propuesta de la Comisión, y tras tres años consecutivos de recortes.
En concreto, el Ejecutivo comunitario propone una reducción del 30 % para la merluza en aguas del Cantábrico, portuguesas y del golfo de Cádiz, pasando de 10.520 toneladas en 2017 a 7.366 toneladas en 2018.
En los caladeros del norte, plantea una reducción del 19 %, de 119.765 a 97.581 toneladas.
Bruselas también propone una reducción en la pesca del rape en aguas del Cantábrico y aguas atlánticas de la península ibérica del 2 % de manera que las capturas se reducirían de 3.955 toneladas a 3.879 en 2018.
En el grupo de las especies que ya han logrado la sostenibilidad, Bruselas incluye el jurel en aguas del Cantábrico, para el que propone un aumento del 21 % en las capturas, pasando de 13.271 a 16.000 toneladas el próximo año.
También plantea una subida para el gallo, con un aumento del 20 % en aguas ibéricas, de 1.159 a 1.387 toneladas.
La CE no ha dado a conocer aún las propuestas para otras poblaciones de interés para la flota española, como la anchoa en aguas del golfo de Vizcaya, pendientes aún de la opinión científica.