SEVILLA. La Policía Nacional ha detenido en Sevilla a un joven de 24 años de edad por presuntos abusos sexuales sobre 15 menores con los que contactó a través de las redes sociales con pretextos como los videojuegos y a los que habría pagado cuantías de entre cien y 400 euros, a cambio de tocamientos y otras prácticas sexuales. El detenido, quien cuenta con antecedentes por corrupción de menores, ha sido ya enviado a prisión.

Según informa la Policía Nacional, la investigación se inició el pasado 24 de octubre, después de que un menor de 16 años denunciase junto a su padre que durante más de un año había sido víctima de abusos sexuales por parte de este joven al que había conocido a través de una red social.

Una vez identificado el presunto autor de los hechos, los agentes de la Policía Nacional localizaron a un total de 14 víctimas más, todos chicos menores de edad con lo que el joven había contactado mediante las redes sociales. Fruto de la investigación, los agentes averiguaron que este joven engatusaba a los menores ofreciéndoles su domicilio para jugar a videojuegos y fumar en cachimba.

Durante los encuentros, según la Policía Nacional, el presunto autor de los hechos prometía dinero a los menores a cambio de realizarles tocamientos, solicitarles fotos de sus genitales u otras prácticas sexuales. El agresor pagaba a los menores entre 100 y 150 euros, cantidades que ascendían hasta casi los 400 euros en algunas ocasiones.

MODUS OPERANDI

Tras el análisis de las declaraciones de los menores que igualmente habrían sufrido abusos sexuales por la misma persona, los agentes constataron que este sujeto actuaba siempre de la misma forma.

Establecía un primer contacto a través de redes sociales con chicos que tenían interés en videojuegos ofreciéndoles pasar una tarde en su domicilio, o bien quedar en la calle pero en zonas donde no pudieran ser vistos ni sorprendidos. Una vez acudían a su vivienda, o al punto elegido, les planteaba la opción de dejarse realizar tocamientos, que algunas veces incluían otros tipos de contactos sexuales. En otras ocasiones el detenido simplemente solicitaba que los menores le enviaran fotografías de sus genitales.

El operativo policial culminó apenas 24 horas después de la denuncia inicial, con la localización y detención del autor de los hechos en su domicilio, donde los agentes intervinieron su teléfono móvil cuyos archivos están siendo analizados.

El detenido, que cuenta con antecedentes por corrupción de menores, ha sido puesto a disposición judicial y ya ha sido decretado su ingreso en prisión. La investigación se mantiene abierta y no se descarta que existan nuevas víctimas, que por miedo a lo que piensen sus progenitores no se han decidido a contar lo sufrido.