vitoria - El Gobierno Vasco ofrece 5.000 plazas docentes a través de OPES, reducir la interinidad del profesorado del 27% al 17% esta legislatura y cubrir las sustituciones desde el primer día en Primaria. Esta es la batería de medidas que el Departamento de Educación puso ayer sobre la mesa de negociación para evitar las cinco huelgas convocadas hasta diciembre por la mayoría sindical (ELA,LAB y Steilas) para revertir los recortes y mejorar las condiciones laborales. La respuesta sindical al término de la primera Mesa Sectorial convocada tras el verano fue la de seguir adelante con las movilizaciones convocadas al estimar “insuficiente” la oferta realizada por Cristina Uriarte. El principal motivo de desencuentro, una vez más, es el baile de cifras que manejan Gobierno y sindicatos en tono a la estabilidad de la plantilla.

En este escenario es de prever que próximamente se vivan nuevos episodios en el marco la Mesa Sectorial. En cualquier caso, es de reseñar el cambio de actitud demostrado por el Departamento de Educación al adoptar de forma unilateral la decisión de revertir el recorte en las sustituciones impuesto por el Gobierno español a través del decreto de abril de 2012 de medidas urgentes de racionalización del gasto público que prohibía contratar a una persona sustituta hasta pasados los diez días. En la oferta de Lakua a los sindicatos se contempla la sustitución de la baja al día siguiente en Primaria y se habría mostrado abierto a modificaciones de acuerdo con las necesidades pedagógicas y de organización de los centros en Secundaria.

Fuentes del Departamento tiraron del argumento de que siempre se ha mostrado “sensible” con respecto al régimen de sustituciones para justificar un cambio que sin duda redundaría en la calidad de la enseñanza. Explicaron que en la actualidad “al amparo de la normativa vigente, y tras un profundo análisis” ha sido posible presentar una mejora al régimen de sustituciones actual. No obstante recordaron que el Gobierno Vasco a pesar de las dificultades económicas nunca ha aplicado al pie de la letra el conocido como decretazo Wert y que hasta ahora se ha aplicado el régimen de sustituciones acordado en el año 2010 con la representación sindical. Ahora, y entre los compromisos adquiridos por el Gobierno, “se ha decidido mejorar dicho régimen de sustituciones, estableciendo sustituciones el primer día para todo el colectivo de Educación Primaria”, afirmaron. Incluso ELA -uno de los sindicatos más beligerantes con el Ejecutivo de Iñigo Urkullu- calificó de “importante” esta aportación del Departamento aunque lamentó que no haya propuesto algo similar para el ciclo de Educación Secundaria.

Hasta aquí llegaron las coincidencias entre las partes, porque el resto de la oferta negociadora se convirtió en una guerra de cifras al término de la reunión. Según Educación se crearán 2.000 plazas docentes más de las previstas y para ELA la propuesta recoge 1.740 docentes menos que los se necesitan y 6.200 seguirán sin estabilizarse. Según la versión ofrecida ayer por la viceconsejera de Administración y Servicios, Olatz Garamendi, el Departamento se compromete a ofertar “el máximo de número de plazas posibles en este momento”. Se crearán un total de 5.000 plazas a lo largo de los cuatro años de legislatura (2017-2020).

Según los datos que maneja Educación, con estas OPES la tasa de interinidad se reducirá en diez puntos pasando del 27% al 17%, por lo que el 83% del colectivo docente sería fijo al final de la legislatura. Los cálculos de los sindicatos varía sensiblemente de este planteamiento. Según ELA, en los últimos años se deberían de haber creado 1.800 plazas más en la enseñanza y, a pesar de ello, Educación propone la creación de sólo 60 puestos de trabajo para solventar esta situación: “La propuesta de convocatoria de OPE para 5.000 plazas durante toda la legislatura no permitiría estabilizar la plantilla, ya que la temporalidad seguirá siendo del 24,9%”.

La central abertzale explicó que en la mesa negociadora Educación ha planteado la convocatoria de OPE hasta el año 2020, de ellas 3.100 irían destinadas a cubrir las vacantes de las jubilaciones, y 1.900, a reducir la alta temporalidad existente en la enseñanza pública. En el 2017 se realizó una OPE para 740 plazas y habrían otras 4.260. “Teniendo en cuenta que en la enseñanza pública hay 9.600 docentes con contrato temporal (38%) la propuesta del Departamento la situaría en un 24,9%”, dijeron. Es decir, la temporalidad se reduciría en menos de un 6% y más 6.200 puestos de trabajo seguirían sin estabilizarse.

Para ELA la propuesta “es insuficiente” por lo que abogó “por continuar con las movilizaciones para presionar al Gobierno hasta que presente una propuesta más acorde con las necesidades del sector”. Aún queda un margen para que continúe el diálogo entre las partes en conflicto antes del 30 de noviembre, fecha en la que la mayoría sindical ha convocado la huelga para el personal docente de la escuela pública.