Fort Lauderdale - La familia y los abogados de Pablo Ibar, acusado de un triple asesinato ocurrido en Florida (EEUU) en 1994, manifestaron ayer su satisfacción por el hecho de que el esperado nuevo juicio ya tenga fecha. En su primera y breve audiencia tras asumir el caso en un tribunal de Fort Lauderdale, la jueza Lisa Porter aceptó de inmediato la petición de la defensa de Ibar de fijar la fecha del 28 de febrero de 2018 para el comienzo de juicio, que se prevé largo.
“Estamos muy contentos y satisfechos al ver que el caso de Pablo se mueve y la jueza ha fijado una fecha para su comienzo”, señaló Joe Nascimiento, del equipo de letrados que defiende a Ibar, quien lleva 23 años preso, más de 15 de ellos en el corredor de la muerte tras ser condenado en 2000 a la pena capital.
El juicio comenzará con la selección del jurado, aunque antes de esa fecha se realizarán probablemente varias reuniones o conferencias de seguimiento para abordar asuntos tan vitales como la forma de elección del jurado de 12 miembros. La Fiscalía ya anunció en junio de 2016 su intención de volver a pedir la pena de muerte para Ibar por los tres asesinatos, cuya autoría él siempre ha negado.
La defensa aseguró que la jueza Porter, el cuarto juez que llega desde 2015 a esta instancia en el tribunal de Fort Lauderdale, tras serle asignado el caso recientemente, es una profesional “muy capaz e inteligente”. Después de que la Corte Suprema de Florida anulara en 2016 la condena a muerte de Ibar y ordenase un nuevo juicio, el juez Raaj Singhal se encargó del caso hasta su abandono de la sala de lo penal en julio pasado para incorporarse a los tribunales civiles. Antes, el encargado fue Jeffrey R. Levenson.
Singhal se despidió del caso Ibar con un revés para la defensa: desestimó la moción presentada para invalidar el testimonio del hombre que identificó al norteamericano de origen vasco hace 23 años como el presunto asesino de tres personas y le denegó los beneficios de la libertad provisional bajo fianza.
Ahora el caso está en manos de la jueza Porter, una magistrada que desarrolla su trabajo en “una unidad de juicios especiales que maneja casos complejos”, precisó Nascimento.
Cándido Ibar, padre de Pablo Ibar, mostró a Efe su alivio porque, al menos “la incertidumbre (de no ver llegar el día de un nuevo juicio) ha desaparecido”. “Ya tenemos una base y una jueza seria que ha fijado la fecha. Eso relaja algo, ya que, aunque Pablo está bien de ánimos, la incertidumbre era muy dura”, resalto Cándido Ibar.
Supresión de pruebas Hasta el comienzo de juicio, es muy probable que la defensa liderada por el abogado Benjamin Waxman presente nuevas mociones para la supresión de pruebas, como la nueva de ADN entregada por la Fiscalía el año pasado, que “presenta muchas dudas” para resultar inculpatoria en el proceso.
Al argumento de los abogados de Ibar de que el juicio no fue justo, por una defensa defectuosa, se añade la significativa duda sobre la culpabilidad de este descendiente de guipuzcoanos al no existir ninguna prueba material que le implique.
Ni las huellas dactilares recogidas en el lugar del triple homicidio, ni las muestras de pelo ni las de ADN coinciden con las de Ibar, quien siempre ha mantenido su inocencia.
En febrero de 2016 el Supremo de Florida anuló la condena a muerte al considerar que las pruebas existentes sobre la implicación de Ibar en los asesinatos de tres personas, el dueño de un local nocturno y dos modelos, eran “escasas” y “débiles”.
En un documento de 27 páginas el Supremo se pronunció en contra de la condena a muerte y expuso los argumentos de la defensa, principalmente la “ausencia de pruebas físicas que conecten a Ibar con el triple asesinato”. - Efe