parís - Una inyección mensual de tratamiento antirretroviral puede bastar a los portadores del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) para mantener a raya la infección, en lugar de un comprimido por día, según un estudio difundido hoy en la IX edición de la conferencia de investigación sobre el VIH. El trabajo, presentado en París por el científico de la Universidad estadounidense de Carolina del Norte Joseph Eron, sugiere que los portadores en estado de supresión viral responden bien a las inyecciones sin importar si son administradas cada cuatro semanas o cada ocho.

En la actualidad, los portadores del VIH deben tomar un comprimido diario para que el virus sea indetectable y no pueda ser transmitido, aunque no es posible eliminarlo completamente. “Para algunos seropositivos, un tratamiento inyectable de larga duración puede ser más cómodo y menos estigmatizante (que el actual), lo que podría incrementar la tasa de seguimiento”, señalan los autores de este ensayo, que ya ha sido probado por varios centenares de personas.

La continuidad al tomar el medicamento es vital ya que, de lo contrario, entre otros efectos, pueden aparecer virus resistentes a los antirretrovirales, una posibilidad que “inquieta” al copresidente de la conferencia, Jean-François Delfraissy.

niña sin rastro del virus Por otro lado, una niña sudafricana de nueve años infectada con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) desde su nacimiento ha vivido los últimos ocho sin medicación ni rastros de la infección, tras haber sido tratada solamente durante sus primeros meses de vida, según un estudio presentado ayer en París.

Los investigadores del Instituto estadounidense de Alergias y Enfermedades Infecciosas presentaron este caso prometedor en la conferencia. En condiciones normales, los seropositivos deben medicarse toda su vida para mantener a raya el virus, pero esta niña ha sorprendido a los expertos al poseer una carga viral indetectable sin la ayuda de tratamiento. Se trata del primer menor en controlar el virus durante un periodo prolongado sin terapia en África, y el tercero a nivel mundial. La joven sudafricana, que permaneció en todo momento bajo supervisión, comenzó a ser medicada cuando contaba con tan solo nueve semanas de vida y dejó de recibir el tratamiento tras 40 semanas, cuando la carga viral había pasado a ser indetectable.

“Este caso podría ayudarnos a comprender cómo el sistema inmunológico controla el VIH y guiar futuras investigaciones sobre la interrupción temprana de la medicación”, afirma el estudio.

En 2015, el Instituto Pasteur de Francia anunció que una adolescente, seropositiva desde su nacimiento, dejó de tomar medicamentos cuando tenía seis y había pasado los últimos 12 sin tratamiento ni rastros de la infección. Un caso similar con un niño infectado con VIH y tratado tempranamente fue descrito en Estados Unidos. - Efe