vitoria - Las listas de espera en la sanidad pública han entrado en fase crítica y están en números rojos. Más de 600.000 pacientes se encontraban a finales de 2016 pendientes de una operación en el Estado, cifra que se ha disparado en un 11% con respecto a los dígitos del año anterior y que prácticamente duplica la de enfermos que se agolpaban en las listas hace una década, 362.000. Esperan muchas personas y esperan más de la cuenta porque la demora media ya se eleva a 115 días, casi un mes más que en 2015, superando el récord que se marcó en plena crisis. Los recortes han dibujado un sombrío panorama con casi cuatro meses de espera para una operación y 72 días para el especialista.
En medio de esta negra fotografía, los vascos son, tras los riojanos, los que deben ejercitar menos la paciencia, con 50 días de espera para una intervención. Además, el País Vasco es la región en la que menos se aguarda para las consultas: 27 días. Los vascos esperan hasta 132 días menos que los canarios que acumulan demoras que se elevan a 182 días. La lista adquiere también tintes alarmistas en Catalunya (173 días), en Castilla-La Mancha (162) y en Extremadura (134). El menor tiempo de espera para operarse lo tienen los ciudadanos de Melilla (33), Ceuta (37), y La Rioja (49).
Tras hacerse públicos estos datos, la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública consideró que “la situación es intolerable, vulnera gravemente el derecho a la protección de la salud de la población”, y solicitó “actuaciones urgentes del sistema sanitario para garantizar una atención sanitaria de calidad a toda la población”. También criticó la disparidad en la situación sanitaria por comunidades, que esta Federación achaca a “los recortes realizados” y la “privatización de los correspondientes servicios sanitarios autonómicos”, lo que “cuestiona la equidad en el acceso a los servicios sanitarios según el territorio en el que viven los ciudadanos”.
Bestias negras Por especialidades, los puntos negros los encabeza Traumatología que es la que más pacientes mantiene en espera (175.257), le sigue Oftalmología (125.638), y Cirugía General y de Digestivo (115.610). Sin embargo, las intervenciones en las que más paciencia se desplega son Cirugía Plástica (189 días), Neurocirugía (171) y Traumatología (143).
46.219 pacientes estaban aguardando para ser intervenidos por un traumatólogo; 30.948 estaban esperando una operación de cirugía general o digestiva; 29.150 para ser operados por el oftalmólogo, 11.682 por el otorrinolaringólogo y 6.112 niños se encontraban en la lista para cirugía pediátrica y 5.588 mujeres para una intervención ginecológica. Las únicas áreas que vieron reducido su número de pacientes fueron cirugía cardíaca y torácica.
Seis meses a la cola Y es que del total de personas que están a la cola en el Sistema Nacional de Salud, diecinueve de cada cien llegan a esperar más de seismeses, un porcentaje que llega a incrementarse hasta un 32,5% en la especialidad de Neurocirugía, que tiene un tiempo de espera media de 171 días. El panorama no mejora en lo referido a primeras consultas y especialidades básicas ya que el tiempo medio de espera está en los 72 días, veinte días más que en junio de 2016. Además, el número de pacientes pendientes de un especialista por 1.000 habitantes es de 45,66. Oftalmología volvió a situarse en el ranking de los peores con 90 días de espera, seguida de Traumatología (82 días), Urología y Ginecología (71 días ambos), Dermatología (70 días), Neurología (69 días) y Digestivo (65 días).