vitoria - Osakidetza está echando el resto para poner a disposición de los pacientes de hepatitis C los nuevos tratamientos antivirales y ya incorpora cada mes a estas terapias de última generación a 175 afectados. Desde 2014, 4.062 enfermos las han recibido, con un índice de curación del 95% entre los que han completado el tratamiento. La cifra prácticamente duplica la previsión inicial ya que el Comité estatal de expertos fijó como objetivo del País Vasco para los años 2015, 2016 y 2017 aplicar las nuevas terapias a un total de 2.367 personas.
Estas cifras han permitido que durante este año siete de cada diez nuevos pacientes tratados presenten un grado de fibrosis F2, F1 o F0, lo que significa que una vez finalizado el proceso con los pacientes en peor estado de salud o con riesgo más alto de desarrollar algún tipo de complicación, el tratamiento se está extendiendo a personas con un estado menos avanzado de la enfermedad.
El Departamento vasco de Salud facilitó ayer estos datos, dos días antes de la celebración en Madrid del Consejo Interterritorial de Sanidad que analizará, entre otros puntos, la estrategia de abordaje de la hepatitis C, con un resultado desigual por comunidades. Sin embargo, el consejero de Salud, Jon Darpón, destacará en dicha reunión que se ha podido atender a más pacientes de los previstos.
Lo más positivo es que las nuevas terapias están facilitando una curación prácticamente absoluta. Del total de los pacientes que han tomado los nuevos fármacos, 3.444 han finalizado el tratamiento a fecha de 12 de junio de este año y el 95 % de ellos están curados, es decir presentan una carga viral negativa a las 12 semanas de concluir el tratamiento. Otros 618 continúan aún recibiendo los antivirales.
En 2014, antes de la autorización para uso comercial de las nuevas moléculas, se trató en Euskadi a 145 enfermos; en 2015, a 1.533; en 2016, a 1.448; y hasta junio de 2017 el tratamiento alcanza a las 4.062 personas. Un 55% de ellas se encontraban en la hepatitis más avanzada, estadio F4, un 23% en F3; y un 22% en F2, F1 y F0. Y es que Euskadi priorizó el tratamiento de los pacientes más graves para continuar paulatinamente con el resto, atendiendo exclusivamente a criterios médicos. Para poder suministrar estos medicamentos innovadores, de un coste muy elevado, el Departamento de Salud ha invertido en estos dos años y medio 65,8 millones de euros.
Según los datos aportados, uno de cada cuatro pacientes tratados desde 2015 hasta hoy estaba coinfectado por el VIH, y un 4% son personas trasplantadas o pendientes de un trasplante de hígado. Respecto al perfil del paciente, siete de cada diez son varones, y la edad media se sitúa en 56 años.