MADRID. Así lo han explicado dos responsables de la Unidad de Familia y Atención a la Mujer que han comparecido junto al jefe superior de Policía de Madrid, Alfonso José Fernández, para informar sobre la detención el miércoles de Pedro Luis Gallego, que tras ser condenado a 273 años de prisión salió de la cárcel en 2013 debido a la derogación de la Doctrina Parot.
"Nosotros tenemos millones de datos y archivos, pero en este caso es una persona que había sido puesta en libertad y sobre la que no cabía aplicar ninguna medida extraordinaria", ha dicho el jefe superior al ser preguntado si a Gallego se le tenía controlado de alguna manera.
Sobre las declaraciones que hicieron en su día fuentes del Ministerio del Interior sobre este tipo de delincuentes reincidentes que quedaron en libertad al derogarse esa doctrina, asegurando que se velaría por la seguridad de la población en el marco de la ley, el mando policial ha dicho que como policía solo puede contestar que los agentes no legislan, sino que cumplen la ley.
Fuentes de la investigación han precisado a Efe que no había ADN del "violador del ascensor" para hacer comparaciones durante la investigación, ya que una vez cumplida la condena esta opción no es legal.
El arrestado, que no confesó las agresiones ni colaboró en nada con la Policía al ser detenido, pasará hoy a disposición judicial en Segovia, aunque en los próximos días la causa se derivará al juzgado madrileño al que compete la investigación.