Bilbao - El trágico incendio que el pasado 27 de mayo se saldó con la muerte de cuatro miembros de una misma familia -una joven pareja y sus dos hijos de corta edad- sumó ayer su quinta víctima. El abuelo paterno de los pequeños, que permanecía ingresado de extrema gravedad en el hospital de Cruces, falleció ayer a consecuencia de las lesiones provocadas por el siniestro.
César Jiménez fue trasladado al centro sanitario con quemaduras en el 30% del cuerpo y graves varias heridas por precipitación. Aunque en los primeros días su estado evolucionó favorablemente, su pronóstico empeoró a lo largo de la semana pasada. Según el último parte médico, difundido el pasado viernes, el hombre permanecía “conectado a ventilación mecánica por un cuadro de distrés respiratorio e inestabilidad hemodinámica” y su situación era “de extrema gravedad”.
Fuentes de Osakidetza confirmaron ayer el fallecimiento del hombre, aunque no dieron más detalles por petición expresa de la familia. Cabe recordar que la mujer de César Jiménez también está ingresada en el hospital de Cruces, donde fue trasladada con quemaduras en el 60% del cuerpo. A lo largo de la semana pasada, se confirmó que permanecía “estable dentro de la gravedad” mientras le realizaban curas de las quemaduras a través de injertos de piel.
Allegados a la familia recibieron ayer la noticia con gran consternación. “Estamos muy impactados. Esto cada vez va a peor. Otro muerto... Y la mujer también está en estado crítico. No tenemos palabras”, acertaba a decir José Jiménez, patriarca, vecino de Barinaga y portavoz de la familia.
Según reveló, dos de los hijos del hombre fallecido, cuyo hermano mayor murió el mismo día del incendio, están en casa de una hermana después de que su hogar se calcinara. “Están muy afectados. Se ha muerto prácticamente toda su familia. El dolor es insoportable”, indicó Jiménez con la voz quebrada.
Mientras tanto, el patriarca reveló que siguen a la espera de poder celebrar los funerales de las víctimas, ya que permanecen a disposición judicial a la espera de que los forenses cotejen su identidad mediante el ADN. “Ahora esperaremos para hacer todos los funerales a la vez”, indicó el patriarca, quien señaló que es muy probable que más adelante dediquen un homenaje a las víctimas.
El Ayuntamiento de Bilbao sigue pendiente de la situación de los afectados en el incendio de Zorrotza, a los que se les ha ofrecido una casa de acogida mientras solucionan la situación urbanística de La Landa. El alcalde, Juan Mari Aburto, mostró ayer a través de un comunicado “su cercanía y solidaridad con la familia y personas allegadas del fallecido”, a quienes trasladó sus condolencias por el fatal desenlace. Goazen Bilbao también se sumó a las condolencias. - A. Araluzea