DONOSTIA. Según la sentencia del caso, los hechos se remontan al año 2008, cuando la procesada suplantó la identidad de su primo para iniciar una relación sentimental con la perjudicada a través de un chat de internet.

La relación entre ambas mujeres continuó posteriormente a través de correos electrónicos, mensajes de whatsapp y distintas redes sociales, por medio de las cuales la procesada envió a la estafada varias fotografías de su primo.

Asimismo, "con ánimo de enriquecimiento ilícito", la encausada hizo creer a la perjudicada que atravesaba "una mala situación económica" debido a "un grave accidente de tráfico sufrido por sus padres".

Por este motivo, la víctima realizó varios ingresos económicos en la cuenta bancaria de la inculpada, entre el 15 de junio de 2011 y el 11 de mayo de 2012, hasta completar un total de 4.390 euros, "en la creencia errónea" de la "necesidad" que tenía quien, hasta entonces, "creía su pareja sentimental".

Durante el juicio por estos hechos, la acusada reconoció lo sucedido y se mostró conforme con la pena que solicitó la Fiscalía, por lo que ahora ha sido condenada a cuatro meses de prisión, aunque la sentencia le sustituye la pena de cárcel por una multa de 720 euros.