Vitoria - El presidente del Observatorio del Medicamento de FEFE (Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles) desgrana con detalle el denominado gasto farmacéutico.
¿Cómo está evolucionado el mercado de genéricos?
-Los genéricos tienen una cuota de mercado que no es todavía la deseable porque hay otros países que tienen más implantación. Estamos en términos generales en que el 40% de los medicamentos que se prescriben son genéricos pero en dinero, en coste, no representan más del 20%.
¿A qué se debe el estancamiento?
-Los genéricos están estancados debido, fundamentalmente, a la equiparación de precios. La patronal de la industria que fabrica genéricos ve que no hay una ventaja competitiva respecto a las marcas. No hay ningún incentivo para prescribir genéricos si los genéricos están al mismo precio que las marcas.
Si costasen menos quizá se acabarían los recelos de los usuarios.
-Efectivamente la marca tiene mucho valor para el imaginario de la gente. Entonces, el que le den un genérico diferente según el momento, trastorna mucho a determinadas personas. A lo mejor son de otro color, de otro tamaño, y claro al mismo precio prefieren el medicamento de marca.
En el Estado la implantación es del 40% pero en Euskadi este porcentaje sube cinco puntos.
-Sí. En el País Vasco hay una implantación muy alta pero aún así se encuentra paralizado porque podría superar tranquilamente el 55%.
¿Está aumentado el número de recetas y de fármacos vendidos?
-Se va recuperando. Pero al paso que vamos, faltan todavía siete años para que el coste de lo que se dispensa llegue a las cifras que teníamos en 2009. En aquel año el gasto llegó a 10.250 millones y en el último año no llega a 10.000. Hay que hablar de recuperación pero no de que se haya superado la crisis de consumo de fármacos.
Y eso que parece que tenemos tendencia a tirar de fármacos antes, por ejemplo, que desarrollar hábitos más saludables.
-Pues desde luego no somos los europeos que más fármacos consumimos. Ni mucho menos. En ningún caso se puede decir que España sea un país que consume más medicamentos que Francia o Italia. Estamos en una posición media con respecto a la UE.
Señalan ustedes que el precio medio en 2016 fue de 11,71 euros por medicamento. Parece un gasto pequeño si consideramos que algunos fármacos son carísimos.
-Es que esos fármacos caros se consumen en una proporción muy pequeña por eso el precio medio es ése. El precio real sería un 15% más que ese importe.
¿Cuál es el volumen anual de recetas? ¿Ha crecido?
-Las recetas se sitúan alrededor de 800 millones al año. Esta cifra ha sido también muy superior en años anteriores como el 2009 o 2010. De hecho, poner el copago a los pensionistas ha traído consigo la caída de un número importante de recetas.
En el País Vasco muchos pensionistas disponen de ayudas para el copago de fármacos.
-Sí y es una solución que funciona muy bien. En la Comunidad Valenciana también hay una serie de subvenciones para colectivos desfavorecidos. Allí también se ha visto que desde que se dan las ayudas han aumentado el número de recetas.
¿Han constatado que en determinados meses el consumo de fármacos se dispara? ¿En invierno con la gripe, por ejemplo?
-No necesariamente. Hemos analizado la influencia de las epidemias de gripe en el gasto de medicinas y comprobamos que como son bastante baratas no hay una gran incidencia en el aumento del consumo debido a las enfermedades del invierno. Porque los medicamentos para la gripe no suelen ser precisamente los más caros. También hay meses de buen tiempo en los que se puede dar un crecimiento importante.
Andalucía arrancó con la subasta de medicamentos y ahora quiere sumarse Asturias ¿Les gustan las subastas? ¿En qué consisten exactamente?
-Consiste en que se abre una subasta pública para una serie de medicamentos y se presentan una serie de laboratorios bajando el precio para la adquisición de los medicamentos. Los que ganan la subasta se quedan en exclusiva en cuanto a prescripciones. Pero no somos partidarios de ese sistema porque las subastas han traído consigo en muchas ocasiones desabastecimientos muy importantes. Y hay que sustituirlos por otros que no están en la subasta.
En Euskadi el Departamento de Salud quiere pagar los nuevos fármacos por resultados en salud. ¿Cómo valoran esta propuesta?
-Positivamente. Aunque solo sea aplicable para unos medicamentos concretos que tienen un precio muy elevado. Son fármacos nuevos que están bajo patente y tienen un precio muy alto mientras mantienen la patente. Por eso sería bueno saber los que de verdad proporcionan mejores resultados para seleccionarlos.