vitoria - No es la primera vez que un alto cargo del Ejecutivo vasco expone públicamente sus dudas y sospechas acerca del retraso, largo, que acumulan las obras del trazado vasco de la línea de alta velocidad ferroviaria. Ya lo hizo hace un par de meses el portavoz Josu Erkoreka y ayer -cuando se conmemoraban las bodas de plata del estreno del AVE en España- volvió a hacerlo Arantxa Tapia.
La titular de Desarrollo Económico y Competitividad del Gobierno Vasco expresó en este sentido que “en su momento alguien tomó la decisión de que a uno de los puntos más importantes de desarrollo industrial” del Estado no se le diera “prioridad y se le otorgara por contra a otros tramos”. Una circunstancia que, a su entender, “fue una decisión absolutamente política”. La consecuencia directa es la falta de conexión con Europa del eje Atlántico, considerado prioritario por la Unión Europea.
Tapia recordó cómo a principios de la década de los años noventa el Corredor Atlántico, del que forma parte la conocida como Y vasca, se definió en Europa “como uno de los corredores esenciales para la UE” al que debían “dar prioridad” los Estados español y francés. Insistió la consejera en que “se decidió hacer otras cosas” por razones, “sobre todo, políticas”, ante lo cual se preguntó “¿Dónde estaba el Gobierno del Estado para que una infraestructura que en los años noventa se calificó como prioritaria no se hubiera ejecutado?”.
Tal y como en su día ya recordara Erkoreka, el primer impulso del tren de alta velocidad desde el grupo parlamentario del PNV se produjo en 2006 a través de un acuerdo presupuestario con el Gobierno socialista. A partir de entonces se diseñó el plan de obras para esta infraestructura. Desde entonces, el proyecto “ha experimentado una ralentización seguramente por las dificultades presupuestarias” y, según apostillaba, por el hecho de que “quienes estaban al frente de las instituciones centrales del Estado, siendo de origen gallego, tendría una cierta preferencia personal” por articular, por ejemplo, la comunicación ferroviaria por Galicia. A Tapia, según subrayó durante una entrevista concedida a la Cadena Ser, “no le sirve” el argumento de que en 2008 la situación económica “era complicada” para acometer la infraestructura: “En 2008 tenía que haber estado finalizada”, enfatizó. Asimismo, la consejera afirmó que en Euskadi no se prepara una red de alta velocidad para unir las capitales vascas, sino para formar parte del corredor Atlántico que permite la conexión con el continente europeo.
“No es una isla” En el 25º aniversario de la llegada de la alta velocidad a España, la consejera señaló que “no parece” que la Y vasca vaya a estar finalizada “mucho antes” de 2023 por “la dificultad técnica” de las obras. Tapia insistió en que es consecuencia de una decisión política tomada en Madrid, que en la actualidad Euskadi todavía no tenga tren de alta velocidad. Y subrayó, además, que el trazado “no es una isla, sino que es parte del Corredor Atlántico uno de los ejes calificados como estratégicos por la Unión Europea”.
El tren de alta velocidad será mixto; es decir, transportará pasajeros pero también mercancías, “una infraestructura muy importante para nuestra industria que nos conectará con Europa, con los puertos, y también con el Corredor Mediterráneo”, sentenció en el día que en España se celebraba el 25º aniversario de la entrada en funcionamiento del primer AVE entre Madrid y Sevilla.