Granada - La Audiencia de Granada ha absuelto al único enjuiciado por el conocido como caso Romanones, el padre Román, acusado de abusos sexuales a un menor, por la falta de persistencia de la acusación y la concurrencia de “graves contradicciones” en la declaración de la supuesta víctima.

La sentencia coincide con la retirada de la acusación que ya hizo la fiscalía durante la última jornada de la vista oral y se refiere a las “versiones de los hechos imprecisas y vacilantes” del joven denunciante. La resolución, de 80 páginas, condena expresamente a la acusación particular al pago de las costas de la defensa.

El fallo absuelve al sacerdote juzgado de los delitos de los que era acusado por las acusaciones particular y popular, ejercida por la asociación Prodeni, de abusos sexuales a menores con penetración e introducción de miembro corporal. La sentencia indica que, a lo largo del procedimiento, especialmente en el acto del juicio, se ha puesto de relieve la “inconsistencia del relato del acusador particular, sin apoyo periférico alguno y, al mismo tiempo, que determinadas circunstancias que él daba por ciertas e inequívocas, han sido desmontadas a través del material probatorio que obraba”.

Según se recoge en la resolución, la absolución del procesado se basa no solo en la falta de pruebas, sino en la falta de convicción que el testimonio de la presunta víctima causa, con “aspectos absolutamente inverosímiles”. Y defiende la imposición de costas por la conducta “desleal” del denunciante. - Efe