OVIEDO. El cuerpo del hombre, de unos 50 años y en avanzado estado de descomposición, fue trasladado al Instituto Anatómico Forense para determinar las causas de la muerte, mientras que los servicios sanitarios se hicieron cargo de la anciana, que al parecer sufre algún tipo de demencia.
Los hechos ocurrieron ayer por la tarde, cuando unos vecinos avisaron a la Policía Local de Langreo debido al mal olor procedente de la casa, ubicada en el número 12 de la calle Farmacéutico Ponga.
Los agentes se personaron en la vivienda, donde la mujer afirmó que tenía miedo de que su hijo la matara.
Al entrar, los agentes encontraron el cadáver del varón, por lo que dieron aviso a la Policía Nacional, que puso en marcha el protocolo con la intervención del médico forense y la policía científica y judicial.