bilbao - Los sindicatos de la sanidad pública, SATSE, ELA, LAB, CCOO, UGT y ESK, celebraron ayer concentraciones en las tres capitales vascas para protestar por lo que consideran un “descaro” en el proceso de privatizaciones dentro de Osakidetza. De esta forma iniciaron una nueva ronda de movilizaciones frente a las tres delegaciones territoriales del Departamento de Salud y anunciaron que incrementarán su intensidad en la medida en la que la dirección de Osakidetza no modifique su postura. Las centrales criticaron la privatización de los servicios de lencería y cocina del Hospital de Urduliz, del de lavandería de Leza y la intención de externalizar el servicio informático general. También rechazaron la pretensión de que en el Hospital de Eibar se pretenda hacer una gestión privada de servicios como la rehabilitación.
Por su parte, el Departamento de Salud del Gobierno Vasco y Osakidetza acusaron a los sindicatos de “distorsionar la verdadera imagen” del sistema sanitario público y de sus profesionales, y tras recordar que “ningún hospital comarcal de Osakidetza presta con sus propios recursos los servicios de lavandería, cocina y limpieza”, subrayando que “es falso” que se vaya a externalizar ningún otro servicio. Según defendieron, “Osakidetza no ha modificado ni modificará su modelo de gestión”. “No tiene sentido alguno que un centro sanitario se dedique a gestionar servicios que empresas especializadas realizan con profesionalidad y a un coste más bajo”, se argumentó desde Lakua. - DNA
