LOGROÑO. En una nota, la Guardia Civil de La Rioja ha añadido hoy que la salida al mercado negro de estos productos, algunos de los cuales sobrepasaban la fecha de caducidad varios años, hubiera supuesto un riesgo para la salud de los consumidores.
Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil en La Rioja investigan en esta operación, denominada "Empicol", a cinco personas como presuntas autoras de un delito contra la salud pública, al existir pruebas y evidencias suficientes que demuestran su participación en la intermediación, suministro, depósito y venta de productos químicos, sanitarios y de cosmética caducados.
Los implicados son una mujer de 71 años, natural y vecina de Bilbao; dos varones de 65 y 35 años, nacidos en La Rioja y vecinos de la ciudad riojana de Calahorra; y otros dos hombres de 48 y 66 años, de nacionalidad española y residentes en Barcelona y Figueras (Girona).
Esta operación, que se desarrolla en La Rioja y Cataluña con la colaboración de la Consejería de Salud del Gobierno riojano, ha permitido, hasta ahora, inmovilizar en una nave de Calahorra más de 32 toneladas de productos con la fecha de caducidad ampliamente sobrepasada en años.
Estos productos, además, se encontraban en deficientes condiciones higiénico sanitarias, que no los hace aptos y seguros para su uso.
La salida al mercado de este material hubiera supuesto un riesgo para la salud de los consumidores por su caducidad, mal estado y porque la mayoría de ellos se encontraban mezclados y almacenados junto a diferentes productos químicos altamente inflamables, corrosivos e irritantes.
Los investigadores han constatado que los productos intervenidos proceden de una nave industrial ubicada en Vilamalla (Girona) y su traslado hasta el almacén de Calahorra corrió a cargo de una empresa gestora de residuos tóxicos y peligrosos con sede en Barcelona.
Esta empresa, en vez de gestionar los productos como residuo y proceder a su destrucción, los vendió a uno de los investigados, que contó con la intermediación del resto de implicados.
Entre los artículos intervenidos figuran vendas, tiritas, botiquines, mascarillas quirúrgicas, pintalabios, cremas de cara, contorno de ojos, productos de limpieza del hogar, tintes para ropa, quitamanchas, ambientadores y pegamentos.
Además, se realizan inspecciones en mercadillos y bazares de La Rioja y de provincias limítrofes, lo que ha permitido localizar, precintar e inmovilizar, en un bazar de Bilbao, una gran cantidad artículos de cosmética caducados que fueron vendidos por la investigada al propietario del establecimiento.
Contra varios de los implicados también se han tramitado diferentes infracciones administrativas en base a las leyes de residuos y suelos contaminados y de Protección del Medio Ambiente de La Rioja; del reglamento europeo sobre los productos cosméticos y del real decreto de almacenamiento de productos químicos.