AUSTRALIA. Los bosques de algas marinas corren el riesgo de desaparecer ante el aumento de la voracidad de los peces provocado por el calentamiento de las aguas a causa del cambio climático, informaron hoy fuentes académicas.

Un grupo internacional de científicos analizó diversos datos, que incluyen imágenes de vídeo tomadas entre 2002 y 2012 cerca del Parque Marino Solitary Island, situado en el estado de Nueva Gales del Sur y a unos 530 kilómetros al norte de Sídney.

La investigación encontró que durante esa década la temperatura del agua aumentó 0,6 grados, indicó la Universidad de Nueva Gales del Sur (UNSW) en un comunicado.

Durante el mismo periodo los bosques de algas desaparecieron y se triplicó la cantidad de peces tropicales y subtropicales que se alimentan de estas plantas.

El estudio concluyó que las altas temperaturas tiene un impacto directo en las algas y otro, indirecto, en el apetito de los peces, que son capaces de arrasar con todas las algas del piso marino.

Además, el cambio climático ha hecho que los peces de aguas cálidas comiencen a invadir zonas templadas y arrasar los bosques de algas, que son el hábitat de una gran variedad de especies marinas incluidos moluscos y crustáceos.

"Nuestro estudio muestra que el picoteo excesivo por parte de estos peces tiene un profundo impacto, que ha desencadenado la deforestación de las algas y la destrucción de los arrecifes", dijo la autora del estudio, la española Adriana Vergés, del Instituto de Ciencias Marinas de la UNSW.

"El aumento del número de peces que comen plantas debido al calentamiento supone una amenaza importante a los ecosistemas tanto en Australia como en todo el mundo", remarcó Vergés.

En el estudio participaron además de científicos de la UNSW, investigadores de organismos y universidades australianas, así como del Centro de Estudios Avanzados de Blanes (España) y la Universidad de Singapur.