PAMPLONA - En los 25.972 folios que obran en el sumario judicial y que contienen toda la información que existía en el teléfono móvil de José Ángel P.M., El Prenda, uno de los cinco acusados de la violación en grupo de Sanfermines, la Policía Foral ha recuperado varios whatsapp que intercambiaron los amigos de este individuo una vez que conocieron su arresto.

Al intuir la noticia, varios amigos comentan en común que lo que deben hacer es borrar las fotos de Prenda en el chat en común y en las redes sociales y otro de los colegas llega a sugerir que se le saque del chat. El día 7 de julio, al conocer las primeras informaciones del caso y las coincidencia entre los datos de los detenidos y los de sus colegas, estos amigos de Prenda y de otros procesados empiezan a preocuparse. Por ello, empiezan a insinuar que los comentarios en los perfiles sociales de Prenda pueden jugar en su contra: “Borrar todo lo que salga de Prenda en el chat. Como la del otro del parque acuático ese, metiéndole mano”, dice un amigo a las 21.49 horas. “También en el Instagram los comentarios ayudan tela. Uf, los voy a borrar, es que los ponemos de cachondeo”, había propuesto otro miembro de la cuadrilla minutos antes. “Verás como sean ellos y pongan en las noticias las fotos del Instagram de Prenda”, llegan también a comentar en un par de ocasiones.

Los whatsapps y los documentos gráficos que en ellos compartían los acusados se han convertido en indicios relevantes de criminalidad para el magistrado, que incluso envió a Pozoblanco una causa por posibles abusos sexuales sobre una joven inconsciente y que fue difundida por la aplicación de mensajería. Otro amigo, ya el día 8 de julio, reconoce sobre el comportamiento del grupo que “jugamos mucho con fuego y cualquier día de estos podía pasar. Si no hubiera sido esto, hubiera sido otro día por otra cosa. Yo menos mal que me eché novia y me hice calzonazos”. El hecho de poner la mano en el fuego por la inocencia de sus colegas suscita todo tipo de comentarios entre sus amigos, tanto a favor de ellos como en contra: “Hombre nosotros los conocemos bien y aquí nadie mete la mano en el fuego por ellos”. A lo que otro dice en otro momento: “Mano en el fuego por mi gordo, aunque sea un golfo”.

Declararán en Pozoblanco Por otra parte, la juez del Juzgado de Instrucción número 1 de Pozoblanco (Córdoba) ha citado a declarar por videoconferencia para el día 28 de octubre a los cuatro jóvenes investigados por supuestos abusos sexuales a una joven de 21 años de edad, antes de que fueran detenidos meses después en Iruñea. Así lo confirmaron ayer a Europa Press fuentes judiciales, que detallaron que los hombres declararán por videoconferencia desde los centros penitenciarios donde se encuentran de manera provisional y sin fianza, en Iruñea y Alcalá Meco (en esta última se encuentran encarcelados tanto el militar como el guardia civil, que al comienzo estuvo en Logroño).

En este sentido, dichas citaciones las fija el Juzgado de Pozoblanco después de que hace un par de semanas aceptara la inhibición del magistrado de Iruñea, por lo que ha abierto la causa en la que investiga los posibles delitos realizados por los cuatro varones hacia la joven de 21 años, que supuestamente sufrió por parte de ellos abusos sexuales y lesiones. - DNA