PAMPLONA. La letrada Carmen Sala, abogada de dos de los cinco encausados en la supuesta violación grupal cometida en Sanfermines, ha decidido desistir de la defensa por "discrepancias con el modo en que realizan y van a realizar la defensa el resto de los abogados que trabajan en este asunto".
Según señala Carmen Sala, "las discrepancias entre los letrados son irreconciliables, no estoy conforme con las continuas manifestaciones de los otros abogados en los medios de comunicación, que a mi entender fomentan un juicio paralelo, discrepo también con el contenido de las manifestaciones que realizan por entender que no benefician a los clientes y con las actuaciones que tienen pensado realizar".
La abogada apunta en una nota que, desde que conoció el asunto por estar de guardia de turno de oficio y cuando asumió la defensa hasta la actualidad, su postura "en un asunto de violencia de género era hacer una defensa técnica y jurídica y respetuosa con todas las partes y por supuesto ausente de posicionamientos machistas". "Creo que la labor de un abogado se hace en el juzgado y como no es conveniente para los clientes llevar dos líneas de defensa distintas, lo mejor es que prosigan el resto de los letrados presentes en el procedimiento o los que decidan contratar", concluye.