Donostia - Los nueve eritreos que durante la madrugada del jueves llegaron a Donostia procedentes de un campo de refugiados de Italia vivieron ayer una jornada de “toma de contacto” con la que va a ser su nueva ciudad a partir de ahora. Según explicaron ayer a este periódico fuentes de Cruz Roja, organización encargada de atender la acogida de estas personas, el grupo de nueve hombres llegó a las dos de la madrugada a Donostia.

Según la coordinadora de acogida de Cruz Roja en Euskadi, Jessica Manzano, los nueve hombres llegaron “destrozados. Contentos, pero bastante cansados”. “Estaban muy contentos y tenían mucha curiosidad por ver cómo era la ciudad en la que van a vivir. Además, llegaban con muchas preguntas sobre si van a poder seguir con sus estudios o cuándo van a poder empezar a trabajar. Sobre todo llegaron con muchas ganas de empezar una vida nueva”, relató Manzano.

En el aeropuerto de Barajas les esperaba un traductor -los nueve hablan tigriña, idioma habitual en Eritrea- y una psicóloga de Cruz Roja Gipuzkoa, que se encargaron de traerlos a Donostia. “El viaje en microbús fue largo y estaban cansados. Pararon a medio camino a cenar algo y luego ya estaban algo más animados”, relataron desde la organización. Estos nueve hombres ocuparán dos de las viviendas que el Ayuntamiento de Donostia ha puesto a disposición de Cruz Roja para la acogida de refugiados.

De esta forma, la de ayer fue una jornada de “toma de contacto” con la ciudad así como con el equipo de apoyo que durante los próximos meses van a atenderles. Por la mañana, pudieron descansar hasta que a las 11.00 horas se reunieron con el grupo de apoyo de Cruz Roja. Con ellos, realizaron los primeros trámites (de carácter interno) y se les explicó en qué va a consistir el programa de acogida. Asimismo, pudieron “dar una vuelta” por la ciudad e incluso tuvieron tiempo para “hacer algo de compra”. “Lo que trasladan es que están muy contentos de estar aquí, aunque siguen muy cansados porque el viaje fue muy largo”, indicaron fuentes de la organización.

A partir de hoy, comenzarán a tener las primeras entrevistas personales para ver el tipo de apoyo psicológico y emocional que precisan, y también si requieren o no de asistencia sanitaria. Además, llevarán a cabo los primeros trámites burocráticos. En este sentido, la prioridad es que presenten en la Policía la solicitud de protección internacional correspondiente, un trámite se llevará a cabo por la “vía de urgencia”, por lo que, desde Cruz Roja esperan que en las próximas horas “sea admitido a trámite”. “Si es así, la Policía les dará una especie de NIE, con una foto, con sus datos, que les sirve como documento provisional hasta que se resuelve la solicitud de asilo”, precisó Manzano. Esta tarjeta es clave, ya que permite a estas personas empadronarse, además de lograr permiso de trabajo tras seis meses.