vitoria/madrid - El pasado octubre, el Gobierno español se comprometió a acoger a 16.000 refugiados que habían llegado a Grecia e Italia huyendo de los conflictos bélicos de sus países de origen. El plazo que asumió entonces era de dos años. Siete meses después, la cifra de refugiados reubicados en el Estado español asciende a 38. En diciembre llegó el primer grupo procedente de Italia y compuesto por 18 personas, tres de las cuales -tres hombres eritreos- fueron reubicados en Bilbao. Sin embargo, el goteo de refugiados es lento y escaso.

Ayer, cinco meses después, aterrizó en Madrid un segundo grupo de 20 personas, en esta ocasión procedente de Grecia, integrado por 13 sirios y 7 iraquíes -siete hombres, cinco mujeres y ocho niños pertenecientes a ocho grupos familiares-. En esta ocasión sus destinos han sido Barcelona (10), Zaragoza (9) y Sevilla (1). CEAR, Cruz Roja y ACCEM se van a encargar de su acogida mientras se tramita su petición de protección internacional, que puede prolongarse hasta dos años. “España cumple sus compromisos”, se congratulaba ayer desde Valladolid el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, quien prometió que estos “se van a cumplir en el plazo establecido”.

Sin embargo, parece una declaración más optimista que real si se tiene en cuenta lo anunciado hasta ahora. El objetivo del Gobierno es que, para finales de junio, hayan llegado al Estado un total de 150 refugiados en cumplimiento del programa comunitario de reubicación -50 de Italia y 100 de Grecia-. De este grupo, Euskadi acogerá a 32 personas -3 residirán en Araba, 15 en Gipuzkoa y otros 14 en Nafarroa-. Como parte de este plan, hoy llegarán de Italia otras 27 personas, 26 hombres y una mujer, todos ellos eritreos, menos uno, de nacionalidad centroafricana. Sus destinos serán Gipuzkoa (9), Madrid (6) y Tarragona (12).

El próximo grupo está previsto que llegue el lunes. Un total de 45 personas viajarán de Atenas a Madrid, desde donde serán trasladados a Gipuzkoa (6), Araba (3), Asturias (7), Illes Balears (8), Guadalajara (2), Madrid (13) y Valladolid (6). Se trata de 21 grupos familiares, compuestos por un total de 22 hombres, 8 mujeres y 15 menores. El consejero de Empleo y Políticas Sociales, Ángel Toña, anunció la mañana de ayer que serían ocho los refugiados procedentes de Grecia que llegarían a Euskadi el lunes, sin embargo, la cifra varió a lo largo del día, ya que una de las mujeres dio a luz momentos antes. Toña explicó que se trata de tres familias, pero rechazó dar más detalles para preservar su intimidad y favorecer su integración.

En este sentido, destacó la labor “exquisita” que llevan a cabo las tres ONG que se encargan de esta reubicaciones, a quienes el Gobierno Vasco ha prestado todo su apoyo e infraestructuras de alojamientos, educativos y sanitarios. “Hemos sido absolutamente respetuosos con la confidencialidad y respeto a las familias. No queremos ser protagonistas en un asunto tan delicado como son las personas que han sufrido un proceso de exilio en sus países. Hemos querido estar cerca de ellos como gobierno, pero no hemos querido sacarnos ninguna foto”, apuntó.

Procedente de Grecia, llegará también el próximo miércoles otro grupo integrado por 19 solicitantes de asilo que serán reubicados en Salamanca (5) y Nafarroa (14). Se trata de ocho grupos familiares compuestos por ocho hombres, cinco mujeres y seis menores de edad. La mayoría, 14, son de nacionalidad siria y los otros 5, iraquí. Según este plan, un total de 111 refugiados habrán llegado en un plazo de nueve días. Descontando los 18 que fueron reubicados en diciembre, quedan otras 21 personas que llegarán antes de que finalice el mes de junio. Sin embargo, el ministerio aún no ha ofrecido información sobre estos refugiados.

Vergüenza europea El Gobierno español destacó ayer que con este contingente de acogidos, el Estado pasa a ser el cuarto país europeo que reubica un mayor número de refugiados procedentes de Grecia e Italia, en cumplimiento del plan comunitario de reubicación, lo que supone el 11,8% de las 1.683 reubicaciones realizadas hasta el momento por los países europeos. Un dato que tampoco deja en buen lugar al conjunto de la UE, que, para cumplir con el compromiso adquirido entre septiembre y octubre del año pasado, deberá repartirse a casi 120.000 refugiados en el próximo año y medio.

El ministerio del Interior también destacó que con los 386 refugiados que recibirá antes de julio, procedentes de Líbano y Turquía se sitúa como el quinto país europeo con mayor número de refugiados del programa de reasentamiento -suponen el 6,1% del total de 6.321 de la UE-. El principal argumento del Gobierno español para justificar este escaso goteo es que “los procesos a veces van más lento de lo que deseamos”. Sin embargo, el caso canadiense deja en evidencia este argumento y a la Unión Europea en su conjunto, ya que, junto con la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) y ACNUR, ha acogido, en tres meses, a 25.000 refugiados sirios procedentes de Jordania, Turquía y Líbano.

Primera fase. Una vez llegan a sus lugares de destino, los solicitantes de asilo entran en el Sistema de Acogida, que prevé una primera fase de integración de seis meses, en la que se trabaja su estabilidad emocional y salud. También se inician los trámites de reubicación y de asistencia sanitaria, además de comenzar con el aprendizaje de idiomas.

Segunda fase. Esta fase es de mayor autonomía, en la que viven en pisos de alquiler y son apoyados con ayudas económicas y laborales, si lo precisan, ya que desde el sexto mes disponen de permiso de trabajo.