maule - El ministro francés de Agricultura, Stéphane Le Foll, dio ayer instrucciones para que se realicen inspecciones en todos los mataderos del país, tras la difusión de nuevos vídeos sobre el maltrato de animales en el matadero comarcal de Maule, en Zuberoa. El comunicado del ministerio de Agricultura precisa que, en caso de falta constatada en esas inspecciones, se procederá a la suspensión de los establecimientos. La nota ministerial fue publicada minutos después del cierre preventivo del matadero de Maule tras la difusión por la asociación L214 de dos vídeos muy impactantes que muestran el sufrimiento de los animales en el establecimiento. En una de las secuencias que mayor difusión consiguió ayer en la red, se pueden ver animales descuartizados vivos. Como máximo responsable del matadero zuberotarra, el alcalde de Maule, Michel Etchebest, decidió cerrar la entidad, en la que trabajan 37 personas. El primer edil centrista asegura que desconocía las practicas que sacaron a la luz las grabaciones de la asociación L214. El cierre preventivo pretende facilitar la investigación que llevan a cabo agentes de la Gendarmería francesa.
El delegado del gobierno galo en Iparralde retiró la licencia al matadero y denunció los hechos ante el tribunal de Pau. La gendarmería de Maule se hizo cargo de la investigación para esclarecer lo ocurrido. El cierre de la instalación tuvo una amplia repercusión en los medios de comunicación de Francia y en las redes sociales. Agricultores y productores se muestran preocupados por las consecuencias que podría tener este caso para el sector, que sigue siendo uno los pilares de la economía en Iparralde.
El director del matadero, Gérad Clément, lamentó ayer que la actuación de tan solo dos personas ponga en peligro el futuro de sus compañeros y de productores de Iparralde. Clément aseguró sentirse traicionado y quitó importancia al hecho de que los vídeos fueran grabados de forma clandestina. Según el director, lo más importante es terminar con este tipo de prácticas contra animales. Ante lo sucedido, algunos empleados argumentan que durante las fiestas de pascua tienen que matar 15.000 corderos en muy pocos días. En el matadero de Maule preparan cada año 3.000 toneladas de carne, un 40% procedente de explotaciones de Zuberoa.
Varios casos de brutalidad El colectivo L214, que milita por la supresión de toda industria y todo consumo de productos animales, reaccionó con alegría ante el cierre preventivo del matadero de Maule, aunque recordaron que en casos similares otros establecimientos fueron reabiertos en pocas semanas. La organización por los derechos de los animales presentará una demanda judicial por actos de crueldad.
El organismo denunció en los últimos meses otros casos similares en dos mataderos del sureste de Francia, que fueron también cerrados de forma temporal a raíz de la difusión de vídeos impactantes. Las atrocidades llevadas a cabo por los trabajadores del matadero de Alés quedaron, por ejemplo, también a la vista tras una grabación con cámara oculta. Las imágenes muestran cómo los animales recuperan la consciencia mientras son descuartizados. El alcalde de la ciudad ordenó el cierre de las instalaciones tras tener acceso al vídeo, cincuenta horas de grabación realizadas en el transcurso de diez días. El grupo de defensa de los animales L214 fue el encargado de infiltrarse entre los trabajadores tras recibir el soplo de una persona que trabajaba en el interior de un matadero que es escenario de la muerte de 3.000 caballos, 20.000 cerdos, 40.000 ovejas y 6.000 cabezas de ganado a lo largo del año. La nave cuenta con un frigorífico capaz de almacenar 7.000 toneladas de carne, lo que le convierte en uno de los mayores existentes en el Estado francés.
Los veterinarios franceses consideran que estos actos de crueldad deben ser perseguidos como delito criminal y mantienen que las violaciones de las condiciones de seguridad en el trabajo son perjudiciales también para los trabajadores. Algunos de los animales que aparecen en el vídeo no han sido aseados y están cubierto de excrementos, por lo que podrían estar potencialmente contaminados. La ley que regula los mataderos estipula que el desangramiento tiene que empezar lo más pronto posible después de dejar inconsciente al animal y asegurar que este no recupera la consciencia antes de morir.
Ese escándalo llevó a la creación la semana pasada de una comisión de investigación parlamentaria sobre las condiciones en las que funcionan los mataderos franceses y cómo son sacrificados los animales. Tras los toros, los animales de circo y la práctica del cebo de ocas en Las Landas, los defensores de los animales hacen frente ahora a cada vez más casos de denuncias por malos tratos en los mataderos.